Por: Noé Pineda Portillo
El Día de las Américas o el Día de América, pues es un solo continente con todo y sus islas y arrecifes que tiene su existencia desde antes del llamado “descubrimiento” realizado por Cristóbal Colón, el europeo que le hizo promoción a esta enorme región del planeta Tierra.
El Día de las Américas, como se le conoce, tiene lugar el 14 de abril en todas las repúblicas americanas, como símbolo de su soberanía y de su unión voluntaria en una comunidad continental, aunque dentro de ellas existan diferencias políticas, ideológicas, religiosas, económicas, sociales y culturales. El primer Día de las Américas fue celebrado en 1931 y se eligió el 14 de abril por ser la fecha de 1890 en que, mediante resolución de la Primera Conferencia Internacional Americana, celebrada en Washington, D.C., se creó la Unión de las Repúblicas Americanas y su Secretaría Permanente. Ya en 1948 se transforma en Organización de Estados Americanos, OEA, en conferencia realizada en Bogotá, Colombia.
En estas declaraciones regionales, se aseguró con espíritu de hermandad panamericanista, que las naciones de América podrían “reafirmar los ideales de paz y solidaridad continental que todos profesan, fortalecer los lazos naturales e históricos y recordar los intereses en común, así como las aspiraciones que hacen a los países del hemisferio un centro de influencia positiva en el movimiento universal a favor de la paz, la justicia y la ley entre las naciones”.
Si bien es cierto, a la OEA, se le han hecho duras críticas por su accionar endeble en muchos casos, con acciones más allegadas a lo que dicta Washington que a la defensa de los intereses de la mayoría de los países miembros, pero también es cierto que ha habido acciones acertadas que han tenido éxito a favor. Uno de esos aportes ha sido lo relacionado al enriquecimiento del derecho internacional con principios como el de la no intervención, el de igualdad jurídica de los Estados, solución pacífica de las controversias, y otras más. Todo esto condujo a la creación e incorporación de organismos especializados para coadyuvar esfuerzos para el desarrollo regional; tales como Organización Panamericana de la Salud (OPS), Instituto Interamericano Indigenista, Instituto Interamericano del Niño, Comisión Interamericana de Mujeres, Instituto Interamericano de Cooperación Agrícola (IICA), Instituto Panamericano de Geografía e Historia (IPGH) creado en 1928 y cuya representación en el Instituto Geográfico Nacional (IGN), borró del mapa don Pepe Lobo Sosa cuando fue Presidente del Congreso Nacional. Somos el único país del continente que no tenemos Instituto Geográfico Nacional.
Otra cuestión que condenamos, es trasladar los días cívicos, o consagrados a la reafirmación de la identidad nacional o interamericana a otras fechas que no son las acordadas.
Importante sería consagrar la identidad regional de nuestras patrias chicas, como la de Centroamérica Histórica o bien nuestra América Central Geográfica que incluya a Panamá y México, pues eso nos haría más grandes en extensión territorial y más respetados ante el mundo y ante otras regiones y naciones; ya sea económica y política. Con eso lograríamos más respeto político y económico; así como la grandeza y orgullo de nuestra cultura regional. En tal forma seremos más poderosos y vigorosos, pues las decisiones que tomemos para volvernos más unidos serían más elocuentes y vigorosas. En esa forma tendríamos un mercado más fuerte y seríamos más llamativos ante otros mercados americanos y mundiales.
Tegucigalpa, 12 de abril de 2024
