TEGUCIGALPA.- La divulgación sobre el extravío de las armas se originó a raíz de las investigaciones hechas por las Fuerzas Armadas (FF.AA.), ya que al detectarse la pérdida de los fusiles, inmediatamente se dio la alerta a varios países para que tomaran las acciones necesarias, afirmó ayer el titular de la Secretaría de Defensa, Marlon Pascua.
El funcionario aceptó que de los cinco fusiles lanzagranadas “Low” encontrados en México, únicamente dos pertenecían al inventario de las Fuerzas Armadas de Honduras, los demás eran de origen desconocido.
Como en México, lo mismo ocurrió con las armas recuperadas en la isla de San Andrés, Colombia; pero no dio más detalles, únicamente se limitó a decir que lo que aparece en la publicación de WikiLeaks no es cierto, ya que se han tergiversado los datos, precisó el funcionario castrense.
Añadió que lo publicado por los medios de comunicación internacionales, fue con el fin de sorprender a la prensa de Honduras y a la opinión pública.
Según Pascua, la divulgación tiene un origen no oficial y de dudosa reputación, el hecho fue publicitado y publicado en todos los medios de comunicaron del país, hace cuatro años.
Eso fue generado por el extravío de unos fusiles de fabricación norteamericana en el 2007 y las Fuerzas Armadas detectaron la pérdida de las armas e iniciaron rápidamente una investigación y en el 2008 se puso a la disposición de la justicia a los responsables del extravío de las armas, afirmó Pascua.
Sin embargo, por ese delito solamente guarda prisión el teniente de navío, Selvin Castro Zelaya, quien era parte de un grupo de 10 oficiales que participaban en el curso TESON, ya que al final de la investigación únicamente él salió responsable de la pérdida de las armas.
El origen de las armas que se encuentran en poder de los cárteles del narcotráfico, especialmente en México, es un tema de discusión que ha estado en la palestra pública en los últimos meses y las acusaciones del origen de esas armas no han sido en contra de las Fuerzas Armadas ni del gobierno de Honduras, calificó.
Recientemente las Fuerzas Armadas capturaron en San Pedro Sula un arsenal, el que no provenía del inventario de las Fuerzas Armadas, por lo tanto los hondureños están siendo víctima del narcotráfico, precisó Pascua.
Ocurrió durante curso de “TESON”
El extravío de las armas ocurrió mientras se desarrollaba un curso de Tropas Especializadas en Selvas y Operaciones Nocturnas (TESON), en el Segundo Batallón de Infantería (Agrupamiento Táctico Especial), donde el oficial Castro Zelaya se desempeñaba como instructor del curso y provisionalmente era el encargado de la logística, confirmó el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Arnaldo Osorio Canales.
En los cursos impartidos dentro de las unidades militares participan miembros de las tres fuerzas de la institución, Fuerza Aérea, Naval y Ejército.
Las armas fueron adquiridas en el Comando de Apoyo Logístico de las Fuerzas Armadas (CALFFAA), porque es la unidad donde se almacena el armamento para ese fin.
Osorio Canales manifestó que ha dado instrucciones a los comandantes de unidades militares para que tomen medidas y contramedidas en los polvorines y arsenales y precisamente este día (ayer) el inspector de las FFAA se desplazó a la Fuerza Aérea para verificar los inventarios.
Pérdida de armas de Naco
En 1986 varios comerciantes de armas entregaron un arsenal a las Fuerzas Armadas en calidad de depósito, las cuales fueron almacenadas en una bodega en Naco, Cortés, de donde desaparecieron unos 500 fusiles.
Osorio Canales manifestó que sobre el caso de Naco se siguieron los procedimientos y los inventarios que estaban en depósito de las Fuerzas Armadas, ya fueron saldadas con la compañía internacional y las negociaciones se hicieron de país a país.
La pérdida de las armas ocurrieron entre el 2000 y el 2004, luego se siguieron los procedimientos y se le entregó las armas a la compañía y ellos seguirán con el proceso, señaló Osorio Canales.