TEGUCIGALPA.- Las fuerzas políticas constituidas como las que están en proceso de formación dieron una “cátedra” de saber dialogar en el desarrollo de la actividad “Dialogando con mi Presidente”, convocado por el mandatario Porfirio Lobo Sosa y desarrollada el sábado en la casa de gobierno.
Los representantes de 12 movimientos políticos llegaron a Casa de Gobierno con la esperanza de plantear las reformas que desean se practiquen en la Constitución de la República.
Los asistentes concordaron en la idea de que los diálogos son necesarios para lograr una verdadera reconciliación en el país y aplaudieron la idea del Presidente hondureño.
Al iniciar con la temática, los participantes se centraron en la realización de cambios que deben practicarse a la carta magna de Honduras, entre ellas transformaciones a los artículos pétreos.
Sin embargo, otros se fueron más allá y hablaron de cambio completo de la Constitución, puesto que ya ha sido violentada en su totalidad.
En la reunión estuvieron presentes los representantes de los partidos y movimientos como Salvador Nasralla del Movimiento Anticorrupción (PAC); Julio Soriano de Convergencia Nacional (CN); Felícito Ávila de la Democracia Cristiana (DC); Manuel Zelaya del Frente Amplio de Resistencia Popular (FARP); Andrés Pavón del Frente Amplio Político Electoral en Resistencia (FAPER); Jorge Aguilar del Partido Innovación y Unidad (PINU); Elvin Santos Lozano del Partido Liberal (PL).
Asimismo, Ricardo Álvarez del Partido Nacional (PN); Jorge González de Tendencia Revolucionaria (MTR); Luis Mayorga de Transformación de Honduras (PTH), Mario Membreño de (PND) Nueva Democracia y César Ham de Unificación Democrática (UD).
POSICIONES
Cada uno de los partidos y movimientos establecieron sus posiciones. Hubo quienes consideraron que hablar de constituyente y reelección es un tema innecesario que no resolverá los problemas de las mayorías.
Para el caso el líder liberal, Jaime Rosenthal Oliva, dijo que “Honduras ya pasó por un tiempo que se permitía la reelección, recuerdo que reelegimos muchas veces y no nos resolvió ningún problema en el país, sólo se siguió profundizando la pobreza”.
Coincidió con la posición, el aspirante presidencial Salvador Nasralla, del Partido Anticorrupción, quien se preguntó “para qué reelección, nada que ver, ya hubo reelección y el país siguió más pobre, además una constituyente con los mismos no tiene sentido sino conformada por nuevas caras”.
Mientras que el pinuista, German Leitzelar, dijo que “lo que el pueblo quiera es lo que se debe hacer, el problema es que los políticos hablamos en nombre del pueblo para manipular la voluntad y decimos que en nombre del pueblo se haga lo que nosotros queremos”.
Entre tanto el miembro del Partido Liberal, Carlos Orbin Montoya, dijo que “habrá acompañamientos siempre y cuando los plebiscitos sean transparentes y se le consulte al pueblo en el orden de necesidad de los cambios que requiere, el Partido Liberal es democrático y está siempre por la defensa permanente de la Constitución y del sistema republicano y democrático”.
Entre tanto, el presidente del Partido Nacional, Ricardo Álvarez dijo que “si necesitamos consultar no es necesario destruir las instituciones, más democracia sí, pero con partidos políticos y nuevos actores que deseen participar”.
CAMBIOS SÍ
Entre tanto, otros grupos fueron del criterio que sólo con cambios se podrá sacar adelante a Honduras. Pero hablaron específicamente de sustituir la Constitución.
Para el caso, los movimientos afines al ex presidente Manuel Zelaya Rosales, coincidieron en que debe instalarse una asamblea nacional constituyente y de esa manera abolirse los artículos pétreos.
Personajes como Andrés Pavón del Faper, César Ham de UD, Guillermo Jiménez Mayén del MTR y Manuel Zelaya, FARP, aseveraron que Honduras no tomará un rumbo positivo si se continúa con las mismas leyes, específicamente la Constitución.
Todos son del criterio que debe consultarse a la población mediante el plebiscito sobre la instalación de una constituyente.
Para el caso Pavón hasta se atrevió a proponer una cuarta urna para la asamblea nacional constituyente que pudiera ser desarrollada por el próximo gobierno o extender el gobierno de Porfirio Lobo dos años más.
El Presidente escuchó cada uno de los planteamientos sin emitir opinión alguna sobre ellas, sólo se limitó a aplaudir la capacidad de plática.
Estos diálogos son realizados con el fin de lograr conocer cuáles son las reformas que deben hacerse a las leyes hondureñas. Pero los políticos no serán los únicos que dialogarán con el Presidente, sino también diversos sectores como empresarios, sindicatos, sectores obreros, gremios magisteriales, entre otros.