Sepultado y dentro de un saco hallan jornalero desaparecido

OMOA, Cortés.- La angustia para los familiares de un trabajador de una finca, en la aldea Los Achotes de esta comunidad, terminó luego que fuera hallado sepultado, tras varios días de desaparecido.

Familiares de Dolores López Díaz (72), manifestaron que este había desaparecido desde el 18 de febrero, pero que mantenían la esperanza de hallarlo con vida.

Parientes de Dolores López Díaz sospechan que uno de sus compañeros de trabajo es el responsable de haberlo ultimado y sepultado en la finca donde laboraba.

Refirieron que al no saber nada de él, decidieron ir a su trabajo para percatarse que estaba bien, sin embargo su sorpresa fue mayor cuando otros empleados y su patrón les expresaron que no lo habían visto desde la mañana del día de su desaparición, luego que se le canceló su salario.

Fue hasta la tarde del pasado jueves que lo hallaron sepultado, en el predio de la hacienda donde laborada desde hacía varios años.

Recordaron que dieron con el hallazgo al observar tierra removida en el solar, por lo que algunos empleados excavaron para percatarse de qué se trataba.

Después de varios minutos excavando se llevaron tremendo susto, al observar el cadáver de un hombre en la fosa, por lo que dieron parte a las autoridades.

Al momento del reconocimiento de ley, López Díaz estaba boca arriba y la mitad de su cuerpo estaba dentro de un costal.

De acuerdo con Medicina Forense tenía aproximadamente cinco días de haber fallecido, pero debido al completo estado de putrefacción en el que se encontraba el cadáver, no se determinó la causa de su muerte, pues también tenía el rostro desfigurado.

Los dolientes, quienes ayer llegaron a la morgue sampedrana a reclamar su cadáver, sospechan de uno de los compañeros de trabajo de la víctima, con quien había tenido problemas, pues supuestamente lo había descubierto cometiendo algunas fechorías dentro de la hacienda.

Agregaron que el ahora occiso le comentó a su patrón de las acciones delictivas que cometía el sujeto, por lo que al enterarse lo amenazó de muerte.

“Mi papá era uno de los empleados de confianza en la finca, el patrón lo apreciaba mucho, pues desde hacía varios años laboraba con él y nunca tuvo una queja suya”, comentó uno de sus hijos.

Refirió que de acuerdo al forense que participó en la exhumación, López Díaz fue torturado por su criminal, ya que presentaba múltiples laceraciones y golpes en su cuerpo. (MV).