Espantoso corte ilegal de árboles en Olancho

En diversos operativos militares realizados en sectores del departamento de Olancho, las Fuerzas Armadas decomisaron más de seis mil pies tablares de madera de las especies de pino y caoba.

El corte ilegal del recurso convierte a Olancho en un desierto.
El corte ilegal del recurso convierte a Olancho en un desierto.

Los uniformados que ahora tienen otras misiones asignadas para combatir el crimen organizado, procedieron a incautar la madera por haber sido cortada ilegalmente, y los propietarios no presentaron permiso de traslado por parte de las autoridades correspondientes.

Se conoció de fuentes oficiales que luego del decomiso, esta fue trasladada al Instituto de Conservación Forestal en el barrio Las Acacias de esta ciudad.

TALAS ILEGALES

Por otra parte, se informó que varios cortes de madera ilegal, incluso en reservas forestales prohibidas, fueron neutralizados por soldados de la 115 Brigada de Infantería, con asiento en Juticalpa y con jurisdicción en los departamentos de Olancho, Colón y Gracias a Dios.

Tras recibir varias denuncias de vecinos de las comunidades afectadas, los militares procedieron a los operativos de rescate de las áreas, en sectores ubicados en el municipio de Dulce Nombre de Culmí, en el oriente de Olancho.

Desde hace mucho tiempo este departamento viene sufriendo la presión de los descombros ilegales de madera, pero nadie está preso por ese delito, a pesar de las capturas in fraganti realizadas.

Se considera que los sectores que más daño le causan a la foresta regional son la ganadería extensiva, la agricultura y la migración campesina, que están terminando con los recursos de importantes reservas forestales como la Muralla, en el municipio de La Unión, al norte de Olancho, y la propia reserva de la biosfera del Río Plátano.