Juan O. Hernández: “Con las microempresas del maíz los pobres sí pueden salir adelante”

El aspirante presidencial del Partido Nacional, Juan Orlando Hernández, inauguró una nueva etapa de su programa social de Microempresarias del Maíz, esta vez con cien beneficiarias en la colonia Betania de Tegucigalpa.

Una vez más, dijo Juan O. Hernández, demostramos que los programas con los que se benefician los pobres no son de maletín o de papel.
Una vez más, dijo Juan O. Hernández, demostramos que los programas con los que se benefician los pobres no son de maletín o de papel.

Junto a su esposa Ana García y Rigoberto Erazo, gerente de marca de Maseca, Hernández les entregó capital semilla (una aplastadora, una máquina de hacer tortillas y tres quintales de harina de maíz), y las animó a poner todo el empeño para salir adelante.

“Hace poco hablé con doña Daysi Fúnez, de la Villanueva, y casi lloró de la emoción cuando me contó cómo su vida ha cambiado desde que es microempresaria del maíz. Con el dinero que gana mandó a arreglar el muro y le hizo mejoras a su casa y le compró una moto a su esposo para que él reparta las tortillas”, contó.

“Este día sentimos que hemos puesto un granito de arena en la vida de más de 100 nuevas microempresarias -agregó-. El pobre, con mucha más razón tiene derecho a salir adelante, no solamente el rico sino también el humilde y el luchador y por eso estamos aquí, para ayudarles a ustedes.

En medio de los aplausos de las beneficiarias, Hernández dijo que “con el programa de las Microempresarias del Maíz se demuestra que los pobres también pueden salir adelante. De eso trata este proyecto”.

Luego les aseguró que en su gobierno se elevará la entrega del Bono 10 Mil de 350 mil a 850 mil familias. “Esto significa dinero en las manos de mujeres para comprar alimentos y medicinas”, expresó.

“Muchas gracias, Juan Orlando, por su solidaridad y por ayudarnos a las más pobres”, dijo, en su corto mensaje doña Miriam Estrada, quien, como beneficiaria, recibió, además del capital semilla, un ecofogón portátil con el que se podrá ahorrar hasta 700 lempiras mensuales en consumo de leña.

Por su parte, Rigoberto Erazo dijo: “Para Maseca es una gran satisfacción y un gran orgullo seguir siendo parte de la historia en Honduras con el apoyo de un proyecto con un gran impacto social dirigido a la gente más humilde de este país, como son las empresarias de la tortilla”.

“Este programa no es de maletín ni tampoco de papel, como suele ocurrir muchas veces, sino que un proyecto con resultados extraordinarios, históricos y contundentes para miles y miles de familias en catorce departamentos donde está presente”, señaló Erazo.