Los motoristas de autobuses de la ruta urbana parecen dueños de las calles, ya que a diario interrumpen el tránsito de vehículos por el anillo periférico.
Con gran “paciencia”, muchas veces estacionan las unidades en medio de la vía, exactamente en la entrada a la colonia La Cañada, en Comayagüela, algo que provoca una mayor congestionamiento vial y malestar de los demás automovilistas que se dirigen a prisa hacia sus centros de trabajo o estudios.
De esta forma, los buseros infringen la Ley de Tránsito frente a “las narices” de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), cuyas oficinas se ubican a unos metros de la estación de buses de las rutas de San José de la Peña por Bajo y La Cañada.
Ante esa situación, se hace un llamado a las autoridades de Tránsito para que inspeccionen la zona y evitar que sigan ocurriendo ese tipo de abusos. (YS).