El gobierno se plantea la posibilidad de reducir las transferencias estatales, entre estas, el 11 por ciento para las alcaldías, como parte de un programa de eficiencia y de ahorro de recursos públicos.
El planteamiento obedece al hecho que son pocas las alcaldías que presentan una ejecución presupuestaria de los fondos asignados, según el titular de la Secretaría de Finanzas, Wilfredo Cerrato.
“Hay 98 millones de lempiras de alcaldías que no han liquidado todavía, es un dato real”, apuntó Cerrato.
Adicionalmente, porque la deuda flotante se mantiene alta, a la fecha se cuenta con un saldo de 5,600 millones de lempiras, más de 727 millones por concepto de transferencias a las alcaldías que se viene arrastrando desde el 2011.
El directivo de la Asociación de Municipalidades de Honduras (Amonh) y alcalde de San Juan de Flores, Francisco Morazán, Francisco Gaitán, mencionó que, en su caso, todos los fondos han sido invertidos en obras sociales y que para los ediles las transferencias estatales significan mucho porque hasta maestros les toca pagar con esos dineros.
Gaitán, también cuestionó que los términos municipales han dejado de cobrar varios tributos, porque el gobierno central ha concedido beneficios fiscales, como a la producción de energía limpia.
Por su lado, el coordinador del Gabinete Económico, Marlon Tábora, comentó que está convencido de los beneficios de la descentralización, pero “con responsabilidad, quiero que quede claro, pero tiene que ir acompañado con el tema de la responsabilidad”.
Agregó que uno de los problemas en la eficiencia en el gasto, es que Honduras invierte bastante en transferencias de capital, pero el impacto en el crecimiento económico es bajo.
Lo que indica que se están invirtiendo mal los recursos del Estado; “necesitamos ser más eficientes para garantizar que el lempira que se coloca en inversión genere mucho más”, acotó Tábora. (JB)