Al inicio de la cuenta regresiva para la audiencia de proposición de pruebas, el 10 de abril próximo, en el proceso para determinar si es extraditado o no a Estados Unidos, el hondureño Carlos Arnoldo Lobo, “El Negro Lobo”, ya cumplió dos noches de estar en detención judicial en una celda de máxima seguridad de la Penitenciaría Nacional (PN), en Támara, Distrito Central.
Detenido en un operativo de fuerzas de seguridad, la mañana del jueves pasado, cuando andaba en una panadería del barrio Río de Piedras, luego de trasladarse de su residencia en la colonia Trejo de San Pedro Sula, Cortés, para hacer compras, Lobo es solicitado en extradición por el gobierno de Estados Unidos por el supuesto delito de conspiración para importar cocaína hacia la unión americana.
El detenido fue trasladado en helicóptero, el mismo jueves, al Primer Batallón de Infantería, en El Ocotal, Distrito Central, de donde bajo un fuerte dispositivo de seguridad fue presentado la mañana del viernes ante el juez natural, que lo remitió a la Penitenciaría Nacional, siempre bajo un amplio operativo de resguardo, entre agentes de la Policía Militar y el Comando de Operaciones Especiales (Cobras).
El profesional del Derecho agregó que su defendido sigue vistiendo una calzoneta y una camiseta Náutica, porque la Policía no le permitió que le introdujeran ropa a la celda de máxima seguridad, ni mucho menos un edredón para soportar el frío en la PN.
“Mi representado está sufriendo pena anticipada, pese a que Carlos Arnoldo no ha cometido delito alguno en Honduras, quiero que sepa la opinión pública que mi representado no tiene derecho a recibir visitas, excepto mi persona; no puede recibir comida, sino es con orden del director, ni mucho menos sol, pero le pude llevar papel higiénico, pasta y cepillo de dientes, nada más, o sea durmió con la ropa que fue capturado”, se quejó.
Suazo Barillas declaró que “a todo privado de libertad que comete delitos en Honduras y es ingresado a celdas de máxima seguridad, como tienen a mi representado, recibe sol por 15 minutos, pero hasta que haya cumplido 20 días de detención, o sea que por eso denuncio que Carlos Arnoldo Lobo está pagando pena anticipada, es una clara violación a los derechos humanos”.
“Espero que mañana (hoy) el Comisionado de los Derechos Humanos, el doctor Roberto Herrera, nombre a su representante para que inspeccione la celda de máxima seguridad en la que tienen a mi representado, porque no puede ser que se le adelante la pena, cuando en mi país no ha sido acusado”, apuntó.
El abogado aseguró que durante la proposición de pruebas demostrará que su defendido no puede ser extraditado, porque nunca cometió delito en Estados Unidos, y ese país debe demostrar cómo es que conspiró para transportar cocaína, según la solicitud de extradición.
Suazo Barillas indicó que el tratado de extradición entre Honduras y Estados Unidos de 1909, ampara a su representado y no puede legalmente ser extraditado como pretende Estados Unidos, a través de la embajada en Tegucigalpa. “Les demostraré que la pretensión de extraditarlo violenta la Constitución de la República”, concluyó.