WASHINGTON (AFP). – La comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley para imponer sanciones a funcionarios señalados por violaciones a los derechos humanos durante las manifestaciones opositoras en Venezuela, que dejan 42 muertos.
El borrador de ley le pide al presidente Barack Obama que ordene la congelación de bienes en Estados Unidos y prohíba la entrada a ese país a responsables de violar derechos humanos de manifestantes en Venezuela, y de impedir a periodistas y ciudadanos informar sobre las protestas.
La congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen, autora del proyecto, señaló que la aprobación “envía un fuerte mensaje a (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro, que el Congreso de Estados Unidos está pendiente de las atrocidades cometidas por su régimen, y que enfrentará las consecuencias”.
Decenas de venezolanos presentes en la sala, incluyendo la actriz María Conchita Alonso, explotaron en aplausos tras la votación del proyecto, que ahora será debatido por los 435 congresistas en el plenario de la Cámara.
“Como fue aprobado de manera apabullante (…) creo que lo tendremos pronto en el plenario. Confío en que se aprobará”, dijo el presidente de la comisión, el republicano Edward Royce.
De manera paralela, la comisión de Relaciones Exteriores del Senado estudia un proyecto similar.
El voto en la comisión de la cámara baja se dio un día después de que la subsecretaria de Estado adjunta para América Latina, Roberta Jacobson, reiterara el rechazo del gobierno estadounidense a imponer sanciones, alegando un pedido de la oposición.
Jacobson, en un testimonio ante la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que la imposición de sanciones en este momento sería “contraproducente”, y daría al gobierno de Caracas, que acusa a Estados Unidos de apoyar las protestas, una excusa para darse a ver como una víctima de Washington.
Sin embargo, la funcionaria dejó abierta la posibilidad si se estanca el diálogo abierto entre la oposición y el gobierno y expresó su frustración por las conversaciones, que tras casi un mes, no dan pistas de avances concretos.