Por: Jairo LANDA
@jairolanda1
Hay algo que quedó evidenciado en la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, y lamentablemente la historia se repitió en Brasil, y es que tanto a Reinaldo Rueda y Luis Fernando Suárez les faltó carácter para manejar al grupo.
Allá en Johannesburgo en la previa al partido contra los suizos, el zaguero central, Víctor “Muma” Bernárdez, en aquellos tiempos suplente de Osman Chávez, explotó y dijo que en la selección solo jugaban “los muñecos de Rueda”, la respuesta del entrenador no se hizo esperar, lo hizo titular contra los helvéticos, decisión errónea del colombiano.
¿Qué pasaba si Ricardo “Gato” Canales levantaba la voz?, ¿habría que hacerlo titular en lugar de Valladares?
En este tipo de situaciones es donde los entrenadores deben demostrar su personalidad para manejar grupos y hacerle entender al plantel que lo que se prioriza es el bien común y no la satisfacción personal, tampoco se vale acudir al revanchismo que fue lo que hizo Suárez.
Coincidentemente otra vez a las puertas de volver a medirse con Suiza en Brasil, la concentración catracha se vio sacudida por el malestar del futbolista, Emilio Izaguirre, a quien increíblemente, el técnico colombiano sacó del campo para dar paso a Juan Carlos García, en el segundo tiempo contra los ecuatorianos.
La decisión de Suárez sorprendió a todos, primero porque el lateral izquierdo del Celtic es lo más rescatable de Honduras en el mundial, segundo porque García juega con las reservas, no con el Wigan de la segunda de Inglaterra, enorme diferencia.
Al final del duelo que los catrachos terminaron perdiendo 1-2, frente a los sudamericanos, Izaguirre dejó salir todo lo que llevaba dentro, dijo a los periodistas que estaba muy molesto, que no entendía el porqué lo habían sacado y que estaba en perfectas condiciones.
Al más puro estilo de un dictador, Suárez le aplicó la ley del hielo, lo mandó al banco de suplentes contra los suizos sin importarle que García no tiene ritmo de competencia lo hizo titular y lo pagó caro.
En la primera anotación de los suizos quedó claro que al zurdo le falta ritmo, Shaqiri recorrió metros sin que García lo frenara y la pelota terminó en las redes. Pero al técnico, quien ya había tomado la decisión, ¿qué le importa que Honduras siga haciendo el ridículo con tal de satisfacer su ego y dejar claro que sus decisiones son mandatos divinos?
Sin embargo tras la eliminación de los hondureños, Izaguirre demostró que le sobra temperamento y le dejó claro al extécnico de la selección nacional que él no es de los que se echa para atrás.
Ayer sin decir nada y bajo un manto de misterio, abandonó la concentración de la selección nacional de Honduras en Porto Feliz, Brasil.
Se supone que todo el plantel de la selección nacional de Honduras permanecería ayer en Porto Feliz, su búnker durante el Mundial Brasil 2014, y que todos partirán hoy hacia Miami para estar en Honduras mañana, pero con la salida intempestiva de Emilio, no se descartan más abandonos abruptos.
Pero esta no es la primera vez que en la era Suárez se produce este tipo de incidentes, tras el partido eliminatoria que Honduras perdió contra Costa Rica, en San José, el delantero Jerry Bengtson abandonó la bicolor sin dar mayores explicaciones.
El colombiano se va a su patria o quizá ya tenga listo otro empleo, su estadía en Honduras le sirvió para engordar su cuenta bancaria y lo único que dejó fue un grupo dividido y el nombre de la selección más sucio que nunca.