La Corporación Municipal encabezada por el alcalde de San Pedro Sula, Armando Calidonio Alvarado, junto a la vicealcaldesa Lilia Umaña, participó el sábado pasado en una eucaristía de solemnidad en honor al patrón San Pedro y San Pablo.
La misa se desarrolló en la catedral San Pedro Apóstol, presidida por el obispo de la diócesis de la ciudad, monseñor Ángel Garachana y el obispo auxiliar monseñor Rómulo Emiliani, quienes instaron a las autoridades municipales a caminar con ánimos y esperanza, a fin de llegar a la patria, a la cual el apóstol Pedro señala.
Garachana, dijo que la iglesia requiere situaciones donde los hijos e hijas de Dios proclamen, oren, quieran y trabajen por la paz, por ello, tienen sus ojos en Jesucristo y en la gente para que tengan la vida plena.
“Celebramos al apóstol San Pedro, quien causa tanto gozo, por ello, es que estamos reunidos en esta catedral y somos miembros del pueblo santo de Dios y de esta ciudad; términos que no se oponen, pues nuestra condición de cristiano, nos hará ser mejores ciudadanos, más justos, responsables, honestos y preocupados del prójimo, cuando en la condición de ciudadano nos une la fe del Señor”, expresó Garachana a los feligreses y a las autoridades presentes.
Por tal razón, instó a los ciudadanos a orar por la iglesia, por las autoridades locales y por todos los hondureños, especialmente por los habitantes de la “capital industrial”, para que la iglesia se renueve y la ciudad de San Pedro Sula también se vaya renovando, para bien de todos.
Entre tanto, Calidonio Alvarado, dijo que “este es un día importante, porque recordamos la verdadera realidad de lo que celebramos, una fiesta Cristiana, que conjuga lo espiritual con lo terrenal, por lo que esa fe y esperanza debemos de tenerla en nuestros corazones y se debe ver reflejada en nuestras acciones”.