Dolor y angustia en el rostro de hija de uno de los mineros atrapados

La hija de Emilio Muñoz, minero atrapado hace cuatro días en San Juan Arriba, El Corpus, al sur de Honduras, estalló en llanto al darse cuenta que los socorristas aún no han podido rescatar a su progenitor.

La adolescente, de apenas 16 años, Mary Muñoz, soltó en llanto.
La adolescente, de apenas 16 años, Mary Muñoz, soltó en llanto.

La adolescente, de apenas 16 años, Mary Muñoz, frente al molino donde quebraba el maíz la mañana de este domingo, soltó en angustioso gemido.

Ella esperaba ansiosa la llegada de padre a su casa de adobe, ubicada en la aldea La Cuchilla, la cual fue construida con el dinero que el obrero ganaba en la mina que se convirtió en su prisionera.

La menor manifestó que su papá cada vez se arriesgaba para ganar mejor, construir el techo y llevar el pan de cada día a la mesa.

Detalló que ganaba 400 lempiras trabajando dos turnos en los profundos agujeros.

“Se iba muy temprano para estar a las 7:00 de la mañana en la mina, y salía a las 10:00 de la noche”.

Este dinero es más de lo que se podía ganar trabajando en otras actividades obreras, agregó muerta en llanto, la jovencita.

Según vecinos de la zona La Cuchilla, el trabajador era incansable es sus labores, que a veces quedada pernoctando en el yacimiento, para ahorrarse las dos horas que tenía que caminar hasta la  agreste montaña y solo descansaba el domingo.

Muñoz no volvió desde el día del derrumbe y las esperanza de hallarlo con vida, ahora se han esfumado para esta humilde y pobre familia, asentada en una “mina de oro”.