La violencia en los centros educativos públicos de Honduras crece cada día. A pesar de los esfuerzos de las autoridades los hechos violentos no se detienen.
Este miércoles un adolescente de 12 años le disparó a su compañera de colegio, dejándola gravemente herida en El Progreso, Yoro, al norte de Honduras.
Según investigaciones de las autoridades del centro educativo, el negarse a pagar tres lempiras provocó el lamentable incidente.
Mientras el Congreso Nacional discute la aprobación de una ley que judicialice y penalice el ilícito, en las escuelas e institutos miles de niños sufren acoso escolar.
Las intimidaciones, burlas y hasta extorsiones se viven diariamente en los centros de enseñanza.
Para el docente Nestor Alemán, consejero Instituto Eduardo Hernández Chévez, lo ocurrido es producto de las condiciones de pobreza y la falta de oportunidades en el país.
“Es alarmantes, quería solicitar tres lempiras a un estudiante y se negó a darlos”, dijo el maestro.
Añadió que existe una cadena de factores, entre ellos la poca atención que el Estado le da a la situación.