El cardenal Óscar Andrés Rodríguez, en la homilía dominical, oficiada en la catedral San Miguel Arcángel, en Tegucigalpa, señaló ayer que “da lástima que personas que acumulan bienes y no los puedan disfrutar porque su procedencia es ilícita y hay otros hondureños que no tienen ni qué comer”.
Así, indicó “qué bello es vivir con dignidad y compartir con el que menos tiene, qué triste es acumular para después ni gozar siquiera”.
Reflexionó que “de qué sirve al hombre, nos dice el evangelio, ganar todo el mundo, si pierde su alma”.
Recordó que “en los últimos días hemos leído noticias de personas de las cuales se les incautan dineros mal habidos y que jamás van a disfrutar nunca porque van a pasar el resto de sus días entre rejas”.
También alabó la acción de personas que se dedican a realizar maratones a favor de los más necesitados, ya que están contribuyendo a amortiguar el hambre de muchos hondureños necesitados. “Lo que se busca es practicar la solidaridad para compartir lo que se tiene. Nadie es tan pobre que no tenga algo que compartir y nadie es tan rico que no tenga algo que necesitar”, apuntó.
El líder católico cuestionó que “cuando no queremos compartir es cuando surgen esas tremendas desigualdades”, para señalar que no es necesario quitarles a unos para darles a otros, “eso es equivocado”, sino que lo que se hace es practicar la solidaridad para compartir lo que se tiene.