Negociazo millonario hacen con diabéticos

En un 100 por ciento se ha incrementado el costo por atención médica e insumos para miles de hondureños diabéticos, luego de que se creara el Centro Nacional del Diabético (CND), en el 2007.

Muchos pacientes deben acudir a las oficinas de trabajo social, para que les quiten los pagos que obliga el Hospital San Felipe.
Muchos pacientes deben acudir a las oficinas de trabajo social, para que les quiten los pagos que obliga el Hospital San Felipe.

El CND nació bajo la dirección del doctor Juan Orlando Molina, con la finalidad de brindar una atención de calidad, a precios accesibles, para miles de pacientes que a diario buscan sus servicios.

La idea del galeno surgió cuando el Hospital General San Felipe no se daba abasto para atender a los pacientes diabéticos, debido a las necesidades que tenían en otras áreas. En ese entonces también hacía falta especializar al personal médico y de enfermería en casos específicos de diabetes.

Sin embargo, el costo de los tratamientos se ha elevado, al grado que el servicio que presta el CND se ha convertido en uno de los más caros, en el cual se cobra a igual o más que en un hospital privado.

CONFABULACIÓN

Denuncias de algunos pacientes indican que las actuales autoridades del San Felipe se habrían confabulado para no comprar medicinas, de tal manera que a los diabéticos no les quede más opción que comprarlas en el CND.

A muchos diabéticos que llegan a buscar atención los remiten al Centro Nacional del Diabético.
A muchos diabéticos que llegan a buscar atención los remiten al Centro Nacional del Diabético.

La organización llega a percibir un promedio de 3 millones de lempiras mensuales, es decir, unos 46 millones de lempiras al año por concepto de cuotas por asociación, consultas, venta de insulina y hasta por el pago por pérdida de citas de cada paciente.

La situación es tan difícil para muchos pacientes que padecen de diabetes, que algunos prefieren regresar a sus comunidades, resignados a morir, ante la impotencia de poder costearse los servicios de salud.

En la actualidad solo el CND posee insulina, ya que el sistema sanitario nacional está colapsado para abastecer de insumos a los diabéticos.

Recientemente, el Hospital Escuela Universitario (HEU) logró comprar más de 10,000 frascos de insulina, pero esto ha sido insuficiente debido a la enorme demanda que hay por parte de los pacientes.

COSTOS ELEVADOS

Los diabéticos que tiene registrado el Hospital San Felipe suman 6,200. A cada uno de ellos les toca pagar 200 lempiras por asociación, 100 por consulta, 100 por pérdida de citas y 240 por la compra de insulina.

El presidente del Sindicato de Trabajadores del Hospital San Felipe, Elvin Canales, aseguró que la situación es tan crítica en este centro asistencial que las autoridades se han convertido en cómplices de diferentes organizaciones, con el propósito de “asaltar” a los apacientes.

El Centro Nacional del Diabético (CND) se creó en el 2007 para brindarles atención accesible y de calidad a los hondureños con diabetes.
El Centro Nacional del Diabético (CND) se creó en el 2007 para brindarles atención accesible y de calidad a los hondureños con diabetes.

“Aquí ya no existe la salud pública, esto se debería de llamar hospital privado San Felipe, ya que ahora los enfermos tienen que pagar para todo y algunos no tienen cómo hacerlo”, lamentó el sindicalista.

Canales afirmó que muchos pacientes que llegan al centro hospitalario se sorprenden cuando les dicen que tienen que pagar por consulta, por medicinas y hasta para reponer citas que los mismos enfermos han perdido porque en ese momento se han encontrado mal de salud.

“Los pacientes diabéticos que acuden diariamente al Hospital San Felipe se están viendo en apuros ante la falta de insulina en el centro hospitalario, al grado que ya tienen casi seis meses sin estar con el medicamento”, subrayó.

“Al día acuden unos 300 pacientes para chequear su salud, pero ante la falta del fármaco los pacientes tienen que buscar otras alternativas, entre estas, comprarlos en las farmacias privadas o en el Centro Nacional del Diabético, los cuales venden a 240 lempiras el frasco”.

La indiferencia, tanto de la ministra de Salud, Yolani Batres; como del director del Hospital San Felipe, ha perjudicado a bastantes enfermos para quienes la única esperanza de adquirir insulina es esperar la licitación, la cual puede durar varios meses.

El vicepresidente del sindicato, Juan Carlos Martínez, explicó que a diario muchos pacientes llegan a la organización a pedir ayuda para que les resuelvan sus problemas.

PACIENTES EN PELIGRO

El costo de los tratamientos se ha elevado en un 100 por ciento, según denunciaron pacientes.
El costo de los tratamientos se ha elevado en un 100 por ciento, según denunciaron pacientes.

“Estamos solicitando que las compras de los fármacos urgentes, como la insulina y otros medicamentos, tienen que hacerse por un mecanismo que no atrase en gran manera y ponga en riesgo la vida de los miles de pacientes”, dijo Martínez.

“Aquí, al San Felipe, llegan diariamente a buscar atención médica con problemas de diabetes unos 300 pacientes, los cuales, en su mayoría, se marchan del hospital sin el medicamento”, denunció el sindicalista.

El dirigente señaló que no es posible que desde el propio gobierno se ponga en peligro la vida de los pacientes, ya que en la mayoría son de escasos recursos económicos y por lo tanto no tienen dinero para comprar sus medicamentos.

“No hay fondos ni recursos propios para comprar esa medicina y la farmacia recientemente fue abastecida, pero con pocas medicinas que no llenan el cuadro básico de un hospital”, declaró.

DESPIDOS DEL CENTRO

Martínez agregó que las autoridades han explicado que en la actualidad se tendrá que esperar un proceso de licitación, que puede durar varios meses, debido a que estos trámites son lentos.

Los diabéticos que tiene registrado el Hospital San Felipe suman 6,200.
Los diabéticos que tiene registrado el Hospital San Felipe suman 6,200.

Para obtener varios medicamentos importantes, “de los que depende la vida de los pacientes, se tendrá que esperar un proceso de licitación, y este trámite es engorroso, lo que significa que puede durar hasta el mes de diciembre”.

“Prácticamente, los diabéticos están condenados a no tener insulina en lo que resta del año, y sin duda, muchos pacientes que no tienen cómo comprarla, literalmente tendrán que esperar la muerte”, aseguró Martínez.

Por otra parte, varios empleados del Instituto Nacional del Diabético fueron despedidos, lo que llega a agudizar más la crisis que viven cerca de cinco mil diabéticos que acuden al Hospital San Felipe. (Por: Mario López)

PACIENTES DESESPERADOS
“Perdí las esperanzas”
diabetico-esperanzas1El paciente Fermín Gonzáles explicó que él ya perdió las esperanzas de recuperarse de la enfermedad, en vista de que su condición económica es difícil y “en el San Felipe solo dinero piden”.
“Un examen cuesta Lps. 2 mil”
diabetico-esperanzasEsta paciente, quien prefirió no dar su nombre, expresó que ella fue a consulta con el especialista, ya que es diabética, “y me mandó a hacerme un examen que cuesta dos mil lempiras”.
LOS GASTOS
En el Centro Nacional del Diabético (CND), al paciente le toca incurrir en los siguientes gastos:

Afiliación al centro 200

Consulta 200

Pérdida de cita 100

Compra de insulina 240