A pesar de la baja en las ventas, los locatarios del mercado San Miguel de Tegucigalpa preparan una gran festividad, en ocasión del día consagrado a su patrón, San Miguel Arcángel, informó Daisy Isabel Ordóñez, presidenta del Comité Pro-Fiesta.
La celebración contempla la alegre alborada, música de marimba, juegos tradicionales, bandas musicales y lo más importante para los católicos de ese centro comercial será la procesión, donde cargan en andas la imagen del santo patrón.
En años anteriores las actividades festivas comenzaban el 22 y concluían el 30 de septiembre, pero ahora la celebración es más corta y este año iniciará el sábado 27 y terminará el martes 30.
El lunes 29 habrá una procesión donde participan los católicos del mercado junto a los feligreses de la Catedral Metropolitana, quienes se trasladan hasta el frente del mercado, donde finaliza el rito.
APOYO DE INSTITUCIONES
La dirigente indicó que el año pasado recibieron el apoyo de la Cervecería Hondureña, de las Fuerzas Armadas (FF AA), que les prestó la marimba, y del Instituto Central Vicente Cáceres, centro educativo que contribuyó llevando la banda marcial.
Agregó que esperan que en esta ocasión los apoyen de igual forma para poder celebrar con bombos y platillos la tradicional fiesta en el mercado San Miguel.
No hay un registro sobre la fecha exacta en que comenzó a funcionar este mercado. Algunos historiadores presumen que fue entre 1904 y 1910, ya que el inmueble fue donado por una familia de Santa Lucía para que allí funcionara un templo católico, el cual sería llamado “Iglesia San Miguel”, pero las autoridades de la comuna entregaron las instalaciones a los vendedores de verduras y otros productos que los sábados y domingos ofrecían en las afueras del edificio.
Los comerciantes llegaban procedentes de varias comunidades cercanas a la capital, transportando los productos en mulas, caballos y burros.
Doña Daysi recuerda que en 1952, cuando tenía ocho años de edad, ella le ayudaba a su abuela, quien poseía un puesto de abarrotería. (EB)
CENTRO DEL COMERCIO EN LOS 50
En la década de los años 50, el mercado San Miguel era el centro neurálgico del comercio en la capital, pero hace unos 20 años la alcaldía capitalina decidió trasladar la terminal de autobuses al mercado Jacaleapa, en la colonia Kennedy, lo cual provocó que las ventas se vinieran abajo, al punto que muchos locatarios abandonaron sus puestos y los que se quedaron aún no logran recuperarse. Los dirigentes le solicitan a las nuevas autoridades locales que les ayuden a mercadear sus ventas, colocando en primera instancia un rótulo en el lugar para que los compradores conozcan de su existencia.