Tasa más alta de desnutrición en América Latina está en Honduras

Honduras enfrenta una de las tasas más altas de desnutrición crónica de América Latina, superada solo por Guatemala, Haití y Bolivia, según un informe emitido por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Trasciende que entre los niños menores de cinco años, 23 por ciento sufren de desnutrición crónica, es decir, son pequeños para la edad.

El retraso en el crecimiento es más común entre infantes con madres sin educación (48 por ciento) y aquellas en los hogares más pobres (42 por ciento).

Dado que el estado nutricional de los niños está estrechamente asociado a su morbilidad y mortalidad, en la Encuesta de Demografía y Salud (Endesa), realizada por el INE, se incluyó un módulo de antropometría en el cual se obtuvo el peso y la longitud, talla de todos los niños nacidos desde enero de 2006 listados en los hogares entrevistados.

La desnutrición crónica ha disminuido desde la Endesa 2005-2006 cuando el 30 por ciento de los niños presentaban retardo en el crecimiento, de acuerdo a los nuevos estándares de medición aprobados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Esa problemática no es solo una tragedia para los que sufren o mueren, es una carga económica para el país, porque reduce el crecimiento, obstaculiza el desarrollo y afecta las capacidades físicas y cognitivas, dando como consecuencia un bajo rendimiento estudiantil.

La baja productividad de los adultos contribuye a perpetuar la pobreza, así como el aumento en la aparición de un gran número de enfermedades que pesan sobre la presupuesto de los sistemas de salud.

La desnutrición tiene diferentes formas: retraso en el crecimiento, pérdida de masa corporal, deficiencia de vitaminas y minerales esenciales. También empeora las enfermedades crónicas, crea trastornos de aprendizaje y retrasos en la educación y el desarrollo.

Mientras, la malnutrición es aún uno de los temas más importantes de salud pública, lo que se refleja en el número de niño/as crónicamente desnutridos menores de cinco años de edad, el número de adultos y niño/as menores de cinco años con deficiencias de micronutrientes y la doble carga de desnutrición y sobrepeso entre lo/as niño/as y adultos.

La evaluación del estado nutricional se hace comparando la población en estudio con el patrón tipo establecido como población de referencia por la OMS.

El patrón internacional es útil porque facilita la comparación entre poblaciones y subgrupos en un momento dado o a través del tiempo. La proporción de niños que están dos desviaciones estándar o más por debajo de la media de la población de referencia de la OMS se utiliza como indicador del nivel de desnutrición en la población en estudio. Por supuesto, que en cualquier población existe una variación natural en peso y talla, variación que aproxima los porcentajes encontrados en la distribución normal, la cual incluye 2.3 por ciento por debajo de 2 desviaciones estándar.