Transporte hondureño es un peligro por flota chatarra

Nuevamente, los miles de usuarios del transporte urbano e interurbano, así como los que utilizan taxis, buses amarillos, ejecutivos y “rapiditos”, viven un verdadero infierno al momento de trasladarse a sus centros de trabajo, o a sus viviendas.

Durante muchos años, los incrementos en pasajes se justificaron bajo la promesa, de parte de los empresarios del transporte, de cambiar la flota de autobuses, la cual quedó en papel mojado. Hoy, los pasajeros abordan unidades que datan desde los años 80.

De toda la región centroamericana, Honduras es el único país que se ha quedado rezagado en cuanto a su flota de vehículos de transporte público se refiere.

Los usuarios tienen que soportar el sentarse sobre asientos rotos, ver choferes deschavetados y mal olientes, y hasta someterse a la tortura de oír reggaetón de letra vulgar en aparatos de sonido estridente que ocasiona incomodidad al pasajero.

PASAJEROS APIÑADOS

El irrespeto de las bahías de parte de las unidades del transporte y la falta de supervisión ocasiona el congestionamiento vehicular.
El irrespeto de las bahías de parte de las unidades del transporte y la falta de supervisión ocasiona el congestionamiento vehicular.

En la administración pasada, la Dirección General del Transporte (DGT) implementó el servicio ejecutivo, el cual sería una modalidad rápida, efectiva y de confort, en vista de que estaba provisto de aire acondicionado, por un valor de 11 lempiras la tarifa.

Sin embargo, la negligencia, apatía y la falta de una supervisión efectiva de las actuales autoridades han hecho que este novedoso servicio se haya convertido en un fracaso, pues los pasajeros viajan como “sardinas” hasta el lugar del destino.

En la actualidad circulan numerosos buses amarillos y taxis que se encuentran en mal estado, tanto de los frenos, dirección y hasta las llantas, lo que ha provocado varias muertes, como la ocurrida recientemente en un sector del departamento de Copán, dejando como saldo 14 muertes.

LEYES ESTÁN OBSOLETAS

Para el titular de la Dirección General del Transporte (DGT), Geovanny Dubón, la situación se le ha ido de las manos debido a que las leyes que rigen el rubro han quedado obsoletas en el país.

A las hora pico, no se observa ningún policía de Tránsito, ni mucho menos un inspector del transporte en las estaciones de buses.
A las hora pico, no se observa ningún policía de Tránsito, ni mucho menos un inspector del transporte en las estaciones de buses.

“La situación para mejorar el servicio del transporte es difícil, para el caso, todavía andan circulando taxis que tienen 30 años de antigüedad, y al momento de decomisarlos se comete una ilegalidad, en vista de que la actual ley del transporte no prohíbe sus circulación”.

Sin embargo, el funcionario explicó que los últimos accidentes que se han dado en el país, principalmente en los buses interurbanos, se deben a fallas humanas y a las condiciones climáticas.

OPERATIVOS NAVIDEÑOS

Sobre las críticas de las que ha sido objeto, Dubón aseguró que “el que me quiere criticar a mí, es que algo quiere, ya que yo no puedo estar en el pedal de cada uno de los buses que circulan en Honduras”.

“No puedo estar en cada posta de control; mis inspectores empiezan a trabajar a las 9:00 de la mañana, ellos son voluntarios y no devengan ningún salario, y por lo tanto, no los puedo obligar a que salgan a las 12:00 de la noche”.

“En la zona norte y occidente estuvo lloviendo copiosamente, lo que significa que este bus que salió en Chamelecón y llegó hasta el lugar donde ocurrió el accidente, y provocó 14 muertes; iba a exceso de velocidad”, indicó.

Los transportistas denuncian constantemente abusos de la Dirección General del Transporte.
Los transportistas denuncian constantemente abusos de la Dirección General del Transporte.

El funcionario, médico de profesión, señaló que en esta temporada navideña incrementarán los operativos y reactivarán el Comité Interinstitucional que por lo general solo se organiza en Semana Santa.

“Como comisión interventora, tuvimos la osadía de poner como fecha máxima 15 años para la circulación de taxis, pero los ruleteros están pidiendo 30 años para la movilización de sus unidades”.

“Yo puedo asegurar que hay unidades de taxis del año 1978, y por ley, no puedo limitarle la circulación a este tipo de unidades”.

HAY FALLAS HUMANAS

Al mencionársele que en la administración anterior no se dieron accidentes de buses, el director detalló que el problema que sucedió en Copán fue humano, de parte del conductor, ya que circulaba con un permiso falso.

En torno al involucramiento de empresarios, buseros y cobradores ligados a la extorsión, el funcionario se limitó a decir que desconoce el tema.

Sin embargo, el dirigente del transporte, Pompilio Coello, afirmó que las autoridades “hablan mucho y hacen poco”, ya que en el transporte hay un completo desorden debido a la falta de un ordenamiento real.

“No sé qué están haciendo las autoridades, ya que en el tema de seguridad los trabajadores estamos expuestos, y a la mano de Dios, en vista que es una política a medias en materia de seguridad”.

MUERTES Y DECOMISOS

Otro de los conflictos mayores es el asesinato de muchos trabajadores del transporte, al grado que en lo que va del año 2012 y 2013 se dieron más de 100 ejecuciones y muchos heridos por no pagar el mal llamado “impuesto de guerra”.

Las rastras circulan sin ningún control de peso, ocasionado el deterioro rápido de las principales carreteras del país.
Las rastras circulan sin ningún control de peso, ocasionado el deterioro rápido de las principales carreteras del país.

Para otros trabajadores del transporte, ligados al servicio de microbuses, la situación en la DGT es peor que de lo que se le ha informado al presidente Juan Orlando Hernández.

“A mí me decomisaron mi unidad; la ley del transporte indica que la multa debe ser máximo de mil lempiras, y nos están cobrando hasta 3,000; es una ilegalidad”, señaló el motorista.

“¿Cómo es posible que el Presidente esté permitiendo esto?, ya que somos personas honradas, trabajadoras, y se está violando la ley decomisando nuestras unidades y dándonos cita hasta para un mes, cuando tenemos que alimentar a nuestras familias”, explicó.

Casi del mismo modo, otro motorista de bus se quejó de los abusos que están cometiendo los efectivos militares, al grado que les decomisan sus documentos a sabiendas de que ellos no están facultados por la ley para ejecutar estas acciones.

El gobierno actual nombró recientemente una comisión interventora en la DGT, encabezada por el general Miguel Ángel García Padgett, la que estaría mejorando el servicio para los usuarios, limpiando los “nidos” de corrupción y agilizando los trámites. Sin embargo, según los mismos empresarios, la DGT está peor que antes, al grado que los papeleos se han vuelto más engorrosos, facilitando la corrupción en algunos empleados.

LA TRIBUNA obtuvo información que indica que cada uno de los funcionarios de la recién nombrada Comisión Interventora en la Dirección General del Transporte devenga un sueldo mensual superior a los 60,000 mil lempiras cada uno. (ML)