‘Cruzado’ andaba manudo del accidente en el anillo

“Cruzado” con cocaína y alcohol andaba el conductor del vehículo que impactó contra un taxi, provocando la muerte del ruletero y de una pasajera, el pasado 14 de enero.
El accidente se produjo en el anillo periférico, a la altura de la colonia Víctor F. Ardón de Tegucigalpa, cuando Renato Alejandro Lobo conducía y perdió el control de su auto.
Durante la audiencia inicial, desarrollada en el despacho de la juez número 7 del Juzgado de Letras de lo Penal Sección Judicial de Tegucigalpa, la Fiscalía probó mediante análisis clínicos que Lobo García, pariente del expresidente Porfirio Lobo Sosa (2010-2014), andaba bajo los efectos de la droga. En dichas pruebas se determinó que había consumido cocaína, no obstante, el análisis clínico sobre el grado de alcohol no fue aportado por el ente acusador.
Sin embargo, la juez tuvo a bien decretar un auto de formal procesamiento por los delitos de homicidio agravado, daños y lesiones agravadas, ilícitos que son conciliables. Es decir, si el imputado se somete a un procedimiento abreviado, podría ser condenado a cinco años y saldría de la cárcel mediante el pago de 10 lempiras por día.
Las víctimas en este lamentable accidente fueron Blanca Ondina Bobadilla y Marvin Ramírez Meza, quienes perdieron la vida. También resultaron heridos Josué Fernando Campos Caballero y Evelin Maricela Raudales.
Los hechos se registraron el pasado 14 de enero, cuando el taxista Ramírez Meza conducía su unidad número 1532 y fue embestido por Lobo García, quien manejaba un carro azul, año 93, con placas PAF 0558, según señala el requerimiento fiscal.

¿QUIÉN ES EL CONDUCTOR?

LA TRIBUNA conoció que el imputado es sobrino de la exdiputada nacionalista por el departamento de Olancho, Rosario Lobo, prima del expresidente Porfirio Lobo Sosa.
El acusado camina con una prótesis porque “La Bestia” le amputó una pierna cuando pretendió llegar en calidad de “mojado” a Estados Unidos.
La vida del ahora privado de libertad siempre fue trágica. Antes del huracán Mitch, en 1998, su madre y su hermana viajaron a Estados Unidos, mientras Lobo García se quedaba con una pariente en el barrio La Hoya de Tegucigalpa. La mala suerte lo persiguió y el huracán provocó que las embravecidas aguas de la quebrada La Orejona se introdujeran a su vivienda. Como pudo, Lobo García se subió al techo y observó cómo el devastador huracán arrasaba con todo. Los bomberos lo rescataron.
Fue así que decidió viajar a Estados Unidos, pero en México “La Bestia” lo alcanzó y le amputaron su pierna. Estuvo varios años interno en ese país y con el tiempo regresó. De la decepción, al verse discapacitado, se dedicó a consumir alcohol y drogas, hasta que tomó un vehículo, sin licencia de conducir, y bien “cruzado” les quitó la vida a las dos personas en mención.
Hoy día solo pasa llorando en la Penitenciaría Nacional, porque no recuerda nada del accidente. Allí purgará prisión hasta que se declare culpable del doble homicidio, para poder conmutar la pena.