La ciudad de Milán en Italia, acoge los restos mortales de uno de los más imperecederos de la plástica hondureña
MOISÉS BECERRA (QDDG)
Quien descansa en la paz del señor desde el 18 de febrero ante la consternación de su esposa e hijos, radicados en Italia.
Egreso de la Escuela Nacional de Bellas Artes en 1948, luego tuvo la oportunidad de realizar estudios en la Academia de Arte de Roma, Italia, graduándose con honores.
Fue este país el que vio el nacimiento artístico de Becerra, quien se convirtió en uno de los más grandes neofigurativistas.
En Milán fundo una galería de arte para promover la cultura latinoamericana, destacándose en la docencia en el área artística.
Por todos estos méritos recibió el premio Marconi: el más importante de Italia. También recibió premios en Florencia, Milán, Paris y Venecia.
Nunca olvido su terruño y los bucólicos paisajes hondureños y su gente fueron una constante en su inmortal paleta.
Nació el 26 de diciembre de 1926 en Dulce Nombre de Copan, sintiendo desde temprana edad amor por la pintura.
Desafiando aquel dicho de que nadie es profeta en su tierra, el si lo fue al recibir el Premio Nacional de Arte y su enorme legado puede ser admirado en el Museo para la Identidad Nacional, en la pinacoteca del Banco Central de Honduras y la Secretaria de Relaciones Exteriores.
En 1961 se establece finalmente en Milán, en donde trabaja incansablemente codeándose con artistas europeos.
En 1987 regresa a Honduras para exponer “Trabajo, Paz y Vida” con una muestra universal en donde valoriza al hombre como transformador del mundo, sin importar su lugar sea molenderas, carpinteros o conquistadores del cosmos.
En 1993 realiza su segunda muestra en suelo catracho: “voz de la tierra” con motivos y colores hondureños, afianzando nuestra identidad nacional.
Realiza su tercera y última exposición en 1998 en Honduras: “Un nuevo rendimiento de cuentas a la patria” que se constituyó en un homenaje a la tierra que lo vio nacer.
Esta es de manera sucinta la trayectoria de MOISÉS BECERRA quien lleno de gloria a su patria y su tierra adoptiva Italia.
Descanse en paz MOISÉS BECERRA y que su familia reciba el cálido bálsamo de la resignación.