OJOJONA. Nuevamente variascomunidades se unen a la forestería comunitaria en Honduras. Esta vez en el municipio de Ojojona, a pocos kilómetros al sur de la capital Tegucigalpa.
Las cooperativas agroforestales “El Buen Camino” y “Saracarán”, que abarcan las comunidades de El Aguacatal, Cencera, San Sebastián, El Tablón, El Carrizal, Surcos de Caña, La Cienega, San Francisco, Potreritos, Saracarán Centro, Quebracho y El Llano recibieron de la mano del alcalde de San Juan de Ojojona, Omar Aguilar Nieto, sus contratos de manejo forestal en bosques ejidales.
En esta entrega participó el director ejecutivo del Instituto de Conservación Forestal (ICF), Misael León, en calidad de testigo de honor.
Esta iniciativa está impulsada por el Programa Adaptación al Cambio Climático en el Sector Forestal CliFor, financiado por la Unión Europea (UE), el gobierno Alemán (BMZ) y el Estado de Honduras.
El Programa CliFor fomenta a la forestería comunitaria, ya que se ha demostrado que el manejo de los recursos forestales por los pobladores locales, organizados en grupos agroforestales, no significa solamente la generación de empleos temporales, sino también una eficiente manera de cuidar los bosques. Donde se aplica esta práctica, la tala ilegal de madera se reduce y los incendios forestales son casi nulos.
“Desde el comienzo de la forestería comunitaria en nuestro país, se han asignado medio millón de hectáreas de bosque a cooperativas agroforestales y de esta manera se ha beneficiado a 50,000 personas. Con el Programa CliFor se prevé duplicar las áreas asignadas y también a los pobladores beneficiados, particularmente a las mujeres”, comenta el Director Ejecutivo del ICF, Misael León. El tema del género juega un papel sumamente importante para el Programa CliFor.
Generalmente excluidos del mercado laboral, se promueve el amplio involucramiento de jóvenes y mujeres en las actividades económicas de grupos agroforestales. “Dentro de nuestra cooperativa El Buen Camino se formó un grupo de 42 mujeres.
Nuestra meta es salir adelante, queremos esforzarnos y queremos empleo para mejorar las condiciones de vida en nuestras familias y en nuestras comunidades”, relata Paula Elvir, socia de la Cooperativa “El Buen Camino”.
Con las recientes firmas de contrato de manejo forestal comunitario, el municipio de Ojojona, otorga a las cooperativas mencionadas el manejo y aprovechamiento racional de sus recursos forestales.
El ICF por su lado incluye a las cooperativas al Sistema Social Forestal y da la asistencia técnica necesaria para el buen manejo y aprovechamiento de los bosques ejidales. “Nunca hemos trabajado organizadamente para sacar beneficios de nuestros recursos.
El entusiasmo es grande para mejorar nuestras vidas. Aquí hay poco acceso a trabajo y por eso formamos la cooperativa para seguir adelante”, expresa el presidente de la Cooperativa “El Buen Camino”, José Reyes, a la que se le ha asignado 629 hectáreas de bosque, mientras la cooperativa “Saracarán recibió 2,752 hectáreas.
Forestería Comunitaria ayuda al manejo del bosque
