En medio de un ambiente de fiesta y democracia, José María Díaz fue electo nuevo presidente del Colegio de Abogado de Honduras (CAH).
El candidato del Frente Patria y Justicia, “Chema” Díaz, se impuso con una amplia diferencia sobre la aspirante a la presidencia por parte de la Alianza para el Cambio, Mirian Barahona.
El escrutinio comenzó cerca de las 5:00 de la tarde, una vez cerrada la votación que se realizó en los 24 capítulos del CAH a nivel nacional en los que ejercieron el sufragio 20 mil abogados.
Inmediatamente, Chema comenzó a marcar diferencia sobre Barahona y cerca de las 8:00 de la noche, el triunfo del Frente Patria y Justicia era prácticamente un hecho.
Los gritos de sus seguidores retumbaron en las instalaciones del CAH, mientras que la facción contraria aceptó la derrota con hidalguía.
En un inicio los representantes de la Alianza para el Cambio se resistían a reconocer la derrota, pero luego de conocer la tendencia, la propia candidata felicitó al movimiento ganador y prometió ayudar en la nueva gestión del CAH.
La Alianza estuvo compuesta por los frentes Independiente, Reforma Democrática, Barra de Abogados Anticorrupción y el Frente Gremialista por la Transparencia, considerados una extensión de los partidos vernáculos Liberal, Libertad y Refundación y el Partido Anticorrupción (PAC).
El Frente Patria y Justicia, en cambio, hizo alianza con el Movimiento Unidad y Cambio, ambos con una acentuada influencia del Partido Nacional y que ha gobernado el CAH en los últimos ocho años.
CUMPLIRÁ PROMESAS
Al conocer los resultados, Díaz reiteró que cumplirá sus promesas de campaña basadas en aumento a la jubilación y mayor cobertura médica, beneficio de lactancia para las abogadas y las esposas de abogados, capacitación integral permanente y rendición de cuentas.
Los comicios se celebraron bajo un ambiente de camaradería con excepción del incidente registrado en Nacaome, Valle, donde los simpatizantes de la Alianza rompieron las urnas y se negaron a recocer la derrota.
La afluencia de votantes en la sede del CAH en Tegucigalpa fue permanente a la lo largo de la alegre jornada, marcada por un activismo impresionante, al puro estilo de las campañas de los partidos políticos del país.
La costosa campaña de ambos movimientos incluyó campos pagados en los medios de comunicación, decenas de activistas, miles de afiches y las infaltables promesas de campaña, con énfasis en la rendición de cuentas en una institución a la que mandatos anteriores le desfalcaron 400 millones de lempiras.
El presidente Juan Orlando Hernández y su esposa, la Primera Dama, Ana García, ambos abogados, votaron en Gracias, Lempira y se sumaron a la larga lista de reconocidos profesionales del Derecho que participaron de la fiesta cívica gremial.