En el centro de Tegucigalpa: La historia de Honduras “escrita” en el mar…

*** El territorio hondureño es más agua que tierra, sin embargo, ¿cuántos “catrachos” conocen sobre esa otra Honduras? La Sala Naval del Museo de Historia Militar nos abre las puertas a esa parte de la historia.

Por: Carolina Fuentes
Fotos: Omar Banegas

¿Cuántas fronteras tiene Honduras? Con esta pregunta, el capitán René Mateo comienza un paseo por la historia de la Fuerza Naval de Honduras, señalando un enorme mapa del país que adorna una de las salas del Museo de Historia Militar, destinado a este importante brazo de las Fuerzas Armadas de Honduras (FF AA).

Un grupo de universitarios lo escucha, en el salón, donde se observan fotografías de valor histórico, uniformes de marines, pequeños barcos de metal e ilustraciones de instrumentos de navegación antiguos.

Algunos muchachos responden que Honduras tiene frontera con Nicaragua, Guatemala y El Salvador, dejando en evidencia ese frecuente “olvido” del “catracho” hacia su territorio marítimo.

Este es el antiguo muelle de la Base de Puerto Cortés.
Este es el antiguo muelle de la Base de Puerto Cortés.

BALA DE CAÑÓN

El capitán Mateo relata que el registro de la zona marítima de Honduras “se remonta al cuarto y último viaje de Cristóbal Colón, se dice que pasó por todo el Litoral Caribe de Honduras, hubo un huracán posiblemente y en el cabo de Gracias a Dios, él dijo: Gracias a Dios que hemos salido de estas honduras”.

En la época de la colonización, según explica el militar, se consideraba que lo que pertenecía de mar a cada nación eran tres millas, “o sea, la distancia que recorría la bala de un cañón”.

“Posteriormente ha habido tratados y en el nuevo convenio internacional y de acuerdo a las leyes marítimas, los países se han suscrito a una nueva medida que son las 12 millas de mar territorial”.

También menciona que hay una zona contigua y una zona económica exclusiva en donde cada país goza de todos los derechos sobre los recursos pesqueros, entre otros.

“Desde el 2002, los países vecinos nos sometimos a la Corte Internacional de La Haya para que diera su veredicto en cuanto a la delimitación fronteriza”.

“Normalmente, en las escuelas y colegios nos dicen a nosotros que la frontera marítima del norte está en el mar Caribe, al sur con el Océano Pacífico, al este con Nicaragua y al oeste con Guatemala y El Salvador. Parcialmente eso es real, pero y entonces, yo les hago una pregunta a las personas: ¿Las Islas de la Bahía a quién pertenecen?”.

“Porque si decimos que la frontera del norte es con el mar Caribe, esto quiere decir que donde el mar moja esas playas, allí comienza la frontera. Entonces es parcialmente errónea la información. Los maestros deben de interesarse en conocer geográficamente el país, qué es lo que nosotros tenemos”.

Las ilustraciones pintadas a mano por el artista Rafael Pineda embellecen las paredes.
Las ilustraciones pintadas a mano por el artista Rafael Pineda embellecen las paredes.

LAS FRONTERAS

El guía militar continúa dando su charla a los estudiantes y señala que Honduras tiene una frontera marítima con Guatemala y Belice, la que aún no está delimitada; también con México y con Cuba, que sí están definidas.

“Yéndonos para el este, tenemos frontera con la isla Gran Caimán, que es un protectorado inglés. Luego tenemos frontera con Jamaica y, pendiente de delimitar, con Colombia”.

A criterio del entrevistado, es de suma importancia que los hondureños tengan presente que Honduras no solo tiene fronteras terrestres, sino también marítimas. Este espacio marítimo es donde la Fuerza Naval de Honduras cumple sus funciones de cuidar los recursos y soberanía nacional.

¿Cuánto mide el territorio marítimo del país? El capitán responde que son “220,800 y fracción de kilómetros cuadrados, tenemos más agua que tierra, en el Atlántico tenemos dos veces más agua que tierra; y en tierra tenemos una proyección hacia el océano Pacífico de 200 millas”.

En una de las salas se exhiben los uniformes de los militares hondureños de la Fuerza Naval.
En una de las salas se exhiben los uniformes de los militares hondureños de la Fuerza Naval.

HOMBRES DE MAR

La primera base naval que se construyó fue la de Puerto Cortés, en 1976. Posteriormente le siguieron la de Amapala, Puerto Castilla, Caratasca y Guanaja. Más tarde se creó el Primer Batallón de Infantería Naval, radicado en La Ceiba; y luego se conforma la Escuela Técnica de la Fuerza Naval, en 1984.

Sin embargo, antes de cosechar estos logros, hubo una generación de marinos hondureños que protegió las aguas nacionales y que, incluso, participó en batallas y en la Segunda Guerra Mundial.

El jefe de la sección de historia del museo, subteniente de administración, Ronmel Ramón Velásquez, relató que en un comienzo Honduras carecía de una Fuerza Naval.

Sin embargo, ante la necesidad de tener presencia militar en el océano Pacífico y en el mar Caribe, “se ordenó la creación de un Ejército de Hombres de Mar, esto fue el 28 de septiembre de 1865, cuando gobernaba al país el general José María Medina; este ejército tenía por misión defender las costas, los mares y sus recursos”.

Poco a poco, el país fue adquiriendo sus barcos; el primero fue el buque de vapor “Tatumbla”, comprado durante la presidencia de don Policarpo Bonilla, quien fue nombrado como primer comandante de esta embarcación.

“Era un buque de vapor que más que todo andaba en el mar Caribe, donde daba servicios de correo y protegía los puertos nacionales. Con el tiempo, ya en 1930, durante la presidencia del general Tiburcio Carías Andino, se adquieren otras embarcaciones como la Lempira, otra que se llama Zambrano, en 1934; la General Carías, en 1937; el vapor Víctor, en 1939, que sirven para salvaguardar el mar”.

En esta foto se ilustra la inauguración de la Fuerza Naval de Puerto Cortés.
En esta foto se ilustra la inauguración de la Fuerza Naval de Puerto Cortés.

BARCO DE GUERRA

En la sala de la Fuerza Naval de Honduras hay banners en los que se leen datos muy interesantes. Para el caso, en uno se detalla “el apoyo de marinos hondureños en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945)”.

Un hecho memorable que se documenta en el museo es cuando Honduras le declara la guerra a Japón, el 8 de diciembre de 1941; y a Alemania e Italia cuatro días más tarde. Asimismo se relata que un 10 de noviembre de 1942, el barco hondureño Contessa navegó por el río Sebou, en Marruecos, cumpliendo con la misión de llevar municiones a las tropas americanas, bajo el recio bombardeo.

“El comandante de las fuerzas estadounidenses pidió la bandera del Contessa para izarla en aquella plaza, así fue que la bandera de las cinco estrellas de Honduras fue uno de los primeros emblemas aliados, izados en el norte de África”.

Las historias que encierran los salones de la Fuerza Naval, en textos, objetos, fotografías e ilustraciones, son fascinantes… Vale la pena reconocer el esfuerzo y el talento de los soldados navales, al crear las pequeñas maquetas de embarcaciones que se exhiben en los pasillos, así como los murales que embellecen las paredes de las salas.

Estas son algunas de las embarcaciones de la Fuerza Naval Hondureña.
Estas son algunas de las embarcaciones de la Fuerza Naval Hondureña.