Inversión no se refleja en la calidad educativa

Honduras ocupa la posición 15 de los 18 países de Latinoamérica conforme un registro de calidad educativa de los egresados de las instituciones de enseñanzas públicas y privadas, señaló el presidente del Colegio Profesional Superación Magisterial de Honduras (Colprosumah), Elías Muñoz.

“Eso se refleja en un estudio de Eden International Business School que indica que los avances son menores comparados a la velocidad en la que caminan los demás países del continente en su lucha por salir de la pobreza”, indicó, al tiempo de manifestar que Honduras no lo ha logrado, pese a que invierte en la educación formal, acceso a la tecnología y el fortalecimiento institucional.

El dirigente añadió que, paradójicamente, Honduras es uno de los países que más invierte en la educación. Para el caso, el 2015 hubo un presupuesto de 27,811 millones de lempiras que representa el siete por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), pero cuando se compara con el número de egresados en primaria y secundaria, no se encuentra correlación con los montos invertidos, contrastó.

“La Secretaría de Educación no ha mejorado la calidad educativa, sin embargo tiene como política exhibir internamente como internacional los índices estadísticos que cumplen con los estándares internacionales”, señaló, para agregar que “eso en vez de estimular a los niños y jóvenes a estudiar provoca lo contrario y uno de los ejemplos es promover siete recuperaciones a los alumnos reprobados hasta que aprueban el año educativo”.

Asimismo, indicó que a los maestros desde hace seis años no se les hace un reajuste salarial, peor un incremento real y eso se refleja cuando un docente inicia su actividad profesional que devenga apenas 6,500 lempiras mensuales, una cantidad menor al salario mínimo de una persona que no tiene ese nivel de educación.

Así, enumeró que no existe un sistema nacional de formación docente y hay un déficit de 5,000 profesores para el área de inglés desde hace diez años y los alumnos no tienen las condiciones pedagógicas necesaria para un buen aprendizaje.

Muñoz estimó que para mejorar la educación de la niñez y la juventud, “se necesitan por lo menos 1,000 millones de dólares (22 mil 900 millones de lempiras) para satisfacer las necesidades más urgente de los cerca de 23,000 centros educativos del país que están deteriorados”.

Otro de los inconvenientes que se encuentran es que desde hace ocho años no se crean plazas docentes y el sistema registra cada año un incremento de 200,000 nuevos alumnos y en los mismos espacios, por lo que cada vez hay más hacinamiento en las aulas de clases, manifestó.

Paradójico a eso, hay políticas de cierre de centros educativos y a la par se registran más de 36,000 centros unidocentes. De igual manera, hay más de 28,000 profesores desempleados que buscan una oportunidad en el sistema educativo público, puntualizó.