Los constantes cortes de energía eléctrica están afectando la economía hondureña; en los últimos días han arreciado en zonas como el centro, sur y oriente del país, en las demás regiones del país se mantienen invariables, según reportes del sector privado.
Olancho se ha convertido en el departamento con mayores cortes “apagones” diarios al registrar hasta ocho horas sin fluido eléctrico, a mediados del año pasado, sucedió algo similar en Atlántida, lo que dio paso a la compra directa de energía a base de gas.
La situación se complica con la llegada de las altas temperaturas, explicaron las autoridades de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), al mencionar que los cortes se deben al recalentamiento de los transformadores, pero se requiere de una inversión millonaria entre el banco fiduciario y el gobierno.
ACTIVIDADES DOMÉSTICAS
La economía familiar se ve afectada, según las amas de casa, ya que se dañan los alimentos que necesitan refrigeración ante la falta de fluido eléctrico, la producción láctea es otra actividad afectada y que predomina en las zonas del interior del país.
El comercio también está siendo “golpeado”, la crisis es tal que los “apagones” de hasta ocho horas, echan a perderse principalmente los productos cárnicos, en tanto que las personas que necesitan ventilación, infantes, ancianos o enfermos en hospitales, están padeciendo “en carne propia” el problema.
De acuerdo al subgerente de la estatal eléctrica, Leonardo Deras, con la llegada del clima caluroso, se eleva la demanda entre 11:00 de la mañana y 1:30 de la tarde lo que hace colapsar “los circuitos y nos obliga a hacer recambio”.
El segundo “pico” de alto consumo se registra habitualmente entre 5:30 y 7:00 de la noche, al sumarse la carga del alumbrado público, por lo que vendría bien en cambiar los patrones de consumo en los horarios antes mencionados.
CONSUMO EN ALZA
Entre el 2015 y ahora, el consumo presenta un aumento de 1,490 a 1,530 megavatios, comentó, en consonancia con las proyecciones del alza de la demanda que se calcula de 6 por ciento para este año y 8 por ciento para el siguiente.
Deras llamó a la población a hacer un uso racional en esta época, pero adelantó que la privatización del segmento de distribución en manos de un banco nacional, hará inversiones por el orden de 380 millones de dólares, lo que vendría a solucionar la problemática.
El miembro de la gerencia de la ENEE, Jesús Mejía, contó que para mediados de año entrará a operar el inversionista internacional que obtuvo la concesión a 30 años con la idea de reducir las pérdidas técnicas y por robo en cuatro puntos por año.
Para ello, se toma de referencia las pérdidas que en la actualidad se calculan en más del 32 por ciento del total de energía que adquiere o procesan las distintas plantas de la estatal eléctrica.