‘Mejor me llevo a mis hijos, antes que los maten’: madre del Saúl Zelaya

Luego del tercer alumno del Instituto Polivalente Saúl Zelaya Jiménez, apareció desmembrado por supuestos mareros, decenas de estudiantes de esa institución decidieron retirarse, otros pidieron traslado o simplemente abandonar estudios para preservar sus vidas.

La primera víctima fue un muchacho de 17 años que fue encontrado muerto a inmediaciones del campo de fútbol de la colonia Villa Los Laureles, en Comayagüela.

La víctima fue identificada como José Daniel Díaz Hernández (17), estudiante del noveno grado de ciclo básico técnico, de ese Instituto, a finales del año pasado.

El segundo se trató de David Rafael Bonilla Moreno (16), de segundo de comercio, cuyo cadáver apareció en marzo pasado metido en un saco de nylon la noche del martes cerca del puente de la colonia Venezuela con señales de haber sido estrangulado un estudiante de secundaria.

Y la tercera víctima se trató de Elier Alberto Vásquez Sánchez (17), quien este lunes fue raptado en horas de la mañana y ayer fue encontrado envuelto en una sábana en un solar baldío de la colonia Santa Bárbara, en Comayagüela, frente a la Fuerza Nacional Antiextorsión.

Asimismo, el mes pasado un docente fue amarrado por supuestos alumnos, pidiéndole referencias de un estudiante, a quien los malviviente querían eliminar.

La presencia militar se mantiene en el Instituto Saúl Zelaya, pero el ataque contra alumno se mantiene.
La presencia militar se mantiene en el Instituto Saúl Zelaya, pero el ataque contra alumno se mantiene.

Después de estos hechos violentos, la población estudiantil de ese popular colegio capitalino, se encuentra aterrorizada, que muchos han decidido abandonar la institución, porque temen por sus vidas pese a que esas instalaciones están resguardadas por elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP).

“No podemos seguir en un colegio donde las maras nos tienen amenazados y a cada rato matan a un compañero. Eso no es calidad de educación, porque no se pueden recibir clases con tranquilidad pensando que en cualquier momento vendrán a sacar a otro compañero para matarlo”, exclamó una de las alumnas del Saúl Zelaya.

Añadió que “es difícil salir de la casa en la mañana para ir a clases al colegios y pensar que en cualquier momento nos pude pasar algo así como ha pasado con nuestros compañero”.

La jovencita añadió que hay un pleito entre simpatizantes de la “Mara-18 y MS-13” siguen peleándose el territorio. “El problema ahora es que los de la 18 de esta zona de la Flor del Campo, ya le dijeron a los de la colonia Las Torres, que se dicen son de la 13 que ya no vengan a este colegio y por eso los están matando”, comentó.

MEJOR ME LOS LLEVO

De su lado, una madre de familia  que llegó al colegio a pedir traslado de sus dos hijos, manifestó que “mi hija ya no pude seguir en este colegio donde a cada rato son amenazados por las maras y segundo están matando a los alumnos”.

Indicó que desde el año pasado había pensado trasladar a su hija a otro colegio, pero se confió que posiblemente este año las cosas cambiaria “pero veo que la situación ha empeorado y mejor me llevo a mis hijos de aquí, porque uno se llena de preocupación, antes de que los maten”.

Al igual que esa madre de familia mucho han optado por pedir traslado de sus hijos para llevarlos a otras instituciones que sean menos peligrosas.

Director del Saúl Zelaya: ‘No quieren a los alumnos que son de Las Torres’

Hernán Fuentes
Hernán Fuentes

El director del Instituto Saúl Zelaya Jiménez, Hernán Fuentes, manifestó que se siente impotente ante tanta inseguridad que está viviendo en ese colegio en el que ya perdió a tres estudiantes a causa de la criminalidad.

“Es lastimoso lo que está pasando con los alumnos porque las amenazas no han terminado, y en el caso de este estudiante Alberto que se dice fue encontrado muerto hoy, (ayer) ayer lunes anduvo  el padre desesperado buscándolo y resulta que tenemos esta noticia”, lamentó.

Añadió que “nosotros no hallamos que hacer porque aquí tenemos la presencia de los militares, pero a los jóvenes los matan allá fuera y eso se nos escapa de las manos”.

Fuente dijo que solo fue a un inicio que se habló de tener toda la seguridad necesaria y hasta le iban a dotar de guardias de seguridad interna, pero eso no se ha cumplido y las consecuencias son lamentables.

“Hay padres de familias que están viniendo a pedir traslado de sus hijos porque lógicamente tienen miedo por estos casos que se han registrado”, al tiempo de decir que los mareros que dominan en ese centro no quieren ver alumnos que sean de las torres porque se suponen que son de la agrupación contraria.