Negocios asolados y otras pérdidas por tomas en UNAH

Un ambiente esperanzador se vive en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), tras conocerse que los estudiantes y autoridades van a un diálogo mañana domingo para dirimir las diferencias que han provocado la suspensión de clases desde hace más de un mes.

El conflicto ha dejado consecuencias que la mayoría de la comunidad universitaria lamenta y la gente ya está desesperada, porque no solo ha provocado la suspensión de clases, sino que la toma de edificios ha tenido otros efectos colaterales.

Muchas personas piden que ya es tiempo que de una vez por todas se dirima ese conflicto, mientras estudiantes religiosos hacen cultos con cánticos de fe y esperanza con la ilusión que todo volverá a la normalidad. Ayer mismo, entonaban una alabanza que en una de sus partes proclama: “Yo tengo fe que todo cambiará”.

No es para menos ha causado la cancelación del segundo periodo académico para cerca de 20,000 alumnos que con muchos sacrificios han logrado ingresar a una carrera universitaria.

Muchos de los comerciantes han optado por retirarse mientras se resuelve la conflictividad.
Muchos de los comerciantes han optado por retirarse mientras se resuelve la conflictividad.

Asimismo, las autoridades se han quejado que cada día pierden alrededor de cuatro millones de lempiras en salarios a docentes sin trabajar y otro personal relacionado con la academia, de igual manera, los convenios con otras universidades y organismos internacionales que no se han podido desarrollar.

“ESTAMOS DEL PELO”

También, están los más de 300 pacientes que no han podido ser atendidos en las áreas de la salud.

Los daños van más allá por cuanto decenas de negocios que funcionan en el interior del campus universitario, están a punto de quebrar, ya que perdieron el volumen de ventas y los gastos por alquiler, pago de personal y servicios públicos son elevados y los ingresos han bajado por falta de clientes.

“Estamos del pelo, porque ya pasa mucho tiempo y no nos podemos recuperar de las pérdidas y lo mejor sería que esto ya se arreglará”, comentaban los propietarios de unos negocios de comidas.

En ese panorama, se observan locales ya cerrados, cafeterías con sus espacios vacíos, chicleras cerradas, fotocopiadoras con candado, canillitas que tienen que devolver los periódicos y cibercafés desolados.

La crisis abarca otros extremos, ya que en los exteriores de la UNAH, también hay otra población que ha sufrido las consecuencias de la paralización de clases, entre ellos, los más de diez puntos de taxis que no encuentran los suficientes pasajeros para hacer su día de trabajo.

Un grupo de estudiantes realiza jornadas religiosas esperando que pronto haya solución a la crisis.
Un grupo de estudiantes realiza jornadas religiosas esperando que pronto haya solución a la crisis.

“Seguimos ´fregados´ aquí que desde hace un mes no hacemos ni para la sal de un huevo”, lamentó el taxista Pablo Fúnez, mientras esperaba pasajeros. Similar situación enfrentan las dueñas de puestos de comidas, porque durante todo este tiempo ha decaído su actividad comercial. (ECA)

EN DIÁLOGO
Comisionada universitaria se ofrece como mediadora

La comisionada universitaria de Derechos Humanos de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Claudia Bustillo, se ofreció a mediar en el conflicto entre el Movimiento Estudiantil y las autoridades de la máxima casa de estudios superiores que mañana van a un crucial diálogo.

En un comunicado, precisó que “nos hemos ofrecido actuar como mediadores en un proceso de diálogo que potencie la búsqueda de una solución integral a este conflicto que con el paso del tiempo se agudiza”. “Creemos que solo con el diálogo sincero, transparente entre actores válidos, creíbles y comprometidos, se podrá encontrar una salida a este conflicto que todos queremos y deseamos que termine”, señaló. (ECA)