La infidelidad masculina tiene una razón genética

Ahora la infidelidad tiene una nueva excusa científica, y es que si un hombre es infiel, no puede mantener una pareja estable o no quiere formalizar su relación, no es meramente su culpa, sino de sus genes.

De acuerdo con un estudio, los hombres más infieles tienen una variante genética que afecta una hormona que estaría relacionada con los vínculos emocionales.

Este variante se presenta en el alelo 334 que gestiona la vasopresina, hormona que se produce por lo regular en los orgasmos y que en ratones, estaría ligado al comportamiento monógano de los machos.

El estudio realizado en el Instituto Karolinska en Suecia, y publicado en la revista PNAS, descubrió que los hombres que carecen de esta variante tienen mayor compromiso con sus parejas y son más fieles.

Pero no todo es tan malo, ya que si el hombre tiene esta variante, no quiere decir que será infiel, ya que según el líder de la investigación, Hasse Walum, el comportamiento humano, y sobre todo las relaciones, están determinados por tres esferas: la biológica, la psicológica y la social.

Además, como dice el psicólogo Walter Riso a El País, “Somo poligámos por naturaleza y monógamo por vocación”.