Un supuesto lujurioso, que tenía la intención de abusar de dos escolares, fue capturado ayer por agentes de la Policía Nacional, luego que la madre de las menores lo persiguiera por varias cuadras.
El incidente sucedió ayer a eso de las 11:00 de la mañana, al momento que dos niñas entre los 7 y 11 años de edad se iban a bañar al río Choluteca, atrás de las instalaciones del Instituto de Servicios Públicos.
Días antes las menores le comentaron a su madre que veían a un hombre escondido detrás de una piedra cuando iban al río.
Pero ayer la mujer avanzó al supuesto violador y “me dio miedo porque ese hombre ya iba encima de mis hijas, por eso lo comencé a seguir con unas piedras”, relató la mujer.
La indignada madre siguió varias cuadras al presunto lujurioso, “pero se me escapó porque él corre más”.
Sin embargo, agentes de la Policía Nacional destacados en la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE) respondieron a los gritos de auxilio de la madre cuando corría detrás del presunto acosador y le ayudaron a capturarlo.
La mujer comentó, toda alterada, que el hombre desde hace una semana vigilaba a sus hijas cuando iban a bañarse al río a su paso por la colonia El Prado de Tegucigalpa.
“Mami mirá que ese hombre que está con un condón me está enseñando cosas feas”, relató a la madre una de las niñas.
De acuerdo a la fémina, el lujurioso siempre llegaba a las 11:30 de la mañana, por lo que ayer lo estaba esperando y le dio persecución.
La mujer reconoció que estaba persiguiendo al hombre para golpearlo porque consideró que quería abusar de sus hijas.
“No lo conozco, no sé quién es, pero las niñas me dijeron que es el hombre que las vigilaba”, exclamaba la mujer al ver detenido al sujeto, mientras le daba cachetadas en la cara.
Por su parte, los agentes policiales identificaron al detenido como Elvyn Dionisio Ordóñez Cabrera, de 29 años de edad, y residente en la colonia Las Palmas, zona oriental de Tegucigalpa.
En su defensa el acusado dijo que no había cometido ningún acto de lujuria en contra de las menores, sino que él iba pasando por esa zona con dirección al hospital psiquiátrico Mario Mendoza, a consulta y en busca de medicinas.
Una hora después de ser atrapado, los policías trasladaron al sujeto hacia una posta policial para luego ser remitido a la fiscalía correspondiente acusado de actos de lujuria.