Cientos de capitalinos, en su mayoría empleados de las empresas privadas, aprovecharon para viajar hacia diferentes zonas del país, para disfrutar de su feriado “morazánico”.
Muchos disfrutarán de tres días de descanso en casa o viajarán a los diferentes destinos turísticos para pasar una jornada llena de diversión.
Las terminales del transporte de Tegucigalpa y Comayagüela, donde se ubican los buses con las rutas hacia Santa Bárbara, Copán, San Pedro Sula, Olancho y Choluteca, entre otras, recibieron alta afluencia de personas, pues ampliaron sus horarios de atención hasta altas horas de la noche.
Desde el lunes, las autoridades policiales realizan vigilancia y patrullajes permanentes para garantizar la seguridad de los ciudadanos y así prevenir atracos u otros actos delictivos en perjuicio de los mismos.
Según estimaciones de transportistas de todas las rutas, los capitalinos, en su mayoría, viajan hacia la zona norte del país y Olancho, con aproximadamente 56 personas en cada bus, seguido de Choluteca, con 30 personas en cada viaje.
VIAJAN EN DOS TURNOS
El día de ayer, los vendedores de boletos registraron una baja en las ventas, ya que la mayoría de viajeros se fue al interior del país durante el fin de semana, mientras que otros vacacionarán desde el jueves, dado que el “feriadón” se rotó en dos turnos en las empresas.
A los vacacionistas les espera el sol, playa, arena así como hoteles, cabañas y haciendas, entre otros refugios donde podrán disfrutar de una jornada bien merecida.
El viajero Ever Escobar, quien se dirigía hacia Guarizama, Olancho, en una empresa de transporte, comentó que hizo una escala desde San Pedro Sula, para llegar a su lugar de origen y así reencontrarse con sus parientes, a quienes no veía desde hace un año.
“Tengo un año de no ver a mi familia, hasta ahora es como puedo reencontrarme con ellos, con mi madre más que todo, la extraño demasiado; uno prácticamente es esclavo del trabajo”, dijo Escobar con la voz entrecortada.
Contrario a Escobar, uno que otro viajero aprovechó los días de descanso para asistir a los velatorios de algunos de sus familiares fallecidos, como le ocurrió a María del Carmen Aguilar, quien viajó ayer hacia Choluteca, para enterrar a su padre. (AD)
