Se conocieron en la feliz etapa de los años escolares, tiempo después vivieron un romántico noviazgo de ocho años y se convirtieron en esposos con la bendición de Dios, en la Basílica de Suyapa.
Ellos son los ingenieros Luis Lozano Amador y Cristina Hernández Oliva, que llegaron al altar para ser ungidos con el sacramento del matrimonio, como fieles creyentes de que su dicha apenas comienza.
Rebosantes de felicidad, regios y con la firme convicción de que su amor durara toda la vida, así lucieron los novios el 19 de noviembre.
No menos contentos lucieron sus padres, el empresario Luis Felipe Lozano y la ingeniera María Félix Amador, los abogados Carlos Hernández y Yadira Oliva.
Ellos dirigieron el brindis para que la dicha de sus hijos perdure para siempre y que en su hogar reine el amor y la comprensión.
Apadrinaron esa unión José Manuel Claros y Ana Hernández de Claros.
Tras la ceremonia la pareja salió sonriente del templo junto con dirección a la Hacienda El Trapiche de Tegucigalpa, donde se llevó a cabo la elegante recepción. Allí los recién casados festejaron juntos a sus invitados hasta las 6:00 de la mañana.
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