Café urge mano de obra vecina para cortar grano

El sector cafetalero hondureño requerirá de importar mano de obra de los países vecinos para levantar la cosecha proyectada en alrededor de diez millones de quintales con expectativas de generar 1,500 millones de dólares en divisas.
La cosecha 2016-2017 empezó el 1 de octubre, a la primera quincena de este terminó la etapa denominada como “el graniteo”, caracterizada por baja producción al salir los primeros granos en algunas zonas bajas del país.
Pero a finales de diciembre y el primer trimestre del próximo año se viene la parte más problemática del proceso de recolección que se produce cuando el grano maduro de forma masiva, indicó ayer el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé)
Al respecto, el presidente del Instituto Hondureño del Café (Ihcafé), Asterio Reyes, comentó que “lo fuerte de la cosecha viene en la segunda quincena de diciembre y enero, febrero y marzo”.
Reyes mencionó que “hasta ahorita no hemos tenido problemas, pero con la producción que esperamos, quiero casi anticipar que vamos a tener problemas en el sentido de la mano de obra hondureña”.
Datos del Ihcafé el año pasado entraron al país entre 35 mil a 40 mil personas de Nicaragua, El Salvador y Guatemala a realizar labores de recolección, según Reyes, porque los hondureños no dan abasto.
“Con esta cosecha que esperamos, si los hondureños no quieren trabajar, tengo la seguridad que van a haber más de 60 mil a 70 mil entre guatemaltecos, salvadoreños y nicaragüenses que van a venir a recolectar café”.
“Sinceramente a mí me da pesar tener que decirlo. Ese dinero deberían de ganárselo los hondureños y que no venga gente de otros país, pero desgraciadamente no podemos esperar a que el hondureño junte ganas y que el café se nos caiga”.
Aseguró que un cortero eficiente puede cortar hasta 15 latas diarias del grano en estado de uva, a un precio promedio de 30 lempiras lo que se traduce en 450 lempiras por jornada y generar así salarios promedio por arriba de diez mil lempiras mensuales.
Según expertos, la situación se agrava con los efectos del cambio climático al manifestar en maduraciones aceleradas, como la que experimentan productores de El Paraíso, donde empieza a caerse la cosecha por falta de mano de obra.
Uno de estos caficultores es Luis Sevilla de la zona de Las Cumbres, en el municipio de Trojes que por la falta de corteros y el clima invernal ha dejado de cosechar algunas parcelas que se ubican en terrenos irregulares.
Sevilla contó a este rotativo que solo cuenta con 15 personas para los trabajos de recolección, cuando en otros años de cosecha abundante ha requerido el doble de personal.
Hasta ahora solo ha podido contar con una docena de corteros de la zona sur, ya que los pobladores de zonas urbanas rehúyen a los trabajos de cosecha.
El corte del grano se hace por familias y un núcleo puede llegar a sumar salarios mensuales por arriba de 28 mil lempiras, aseguró el entrevistado, al tiempo de hacer un llamado a la población desocupada para sumarse a las labores de recolección del aromático.
El durante la temporada, el café genera más de un millón de empleos, entre directos e indirectos, al tiempo que reactiva el consumo en las zonas de influencia, a nivel macro representa la principal fuente de divisas del sector agro. (JB)