TSE debe permitir voto de los militares

Por Armando Cerrato

La inscripción del Presidente de la República Juan Orlando Hernández Alvarado, como candidato de dos movimientos nacionalistas para ser reelecto Presidente de la República, abre también la puerta para que los miembros de los cuerpos armados, oficiales, clases y tropa puedan ejercer el sufragio y optar a cargos de elección popular.
Esto es así porque el Presidente actual es constitucionalmente el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Honduras y ha sido autorizado a presentarse para una reelección pese a que la misma ha sido mil veces calificada ilegal e inconstitucional, sin embargo, el Tribunal Supremo Electoral (2-1) decidió que la reelección va apelando a la doctrina internacional del derecho, dando por sentado muy ilógicamente que el elegir y ser electo es un derecho humano.
La Ley Electoral hondureña prohíbe a los miembros de las Fuerzas Armadas el proponerse para cargos de elección popular y sufragar en los procesos electorales, por ello, desde el punto de vista técnico-jurídico el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas no puede aspirar y ni siquiera ejercer el voto.
Pero como la Constitución de la República es puro papel entintado, irrespetado a más no poder por todos aquellos lambiscones, políticos nacionalistas, que ven en Juan Orlando Hernández Alvarado un émulo del tristemente célebre dictador Tiburcio Carías Andino.
JOH por su parte ha declarado que hace un estudio del derecho comparado antes de tomar una determinación que le permita cumplir a cabalidad con la Ley Electoral vigente que ordena a los funcionarios públicos, aspirantes a puestos de elección popular a renunciar seis meses antes del proceso electoral en que han de participar.
En su calidad de Presidente de la República y de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, JOH se convierte en doble violador de la Constitución de la República y de todo el estamento legal del país que juró cumplir y hacer cumplir siendo fiel a la República al tomar posesión de su cargo.
Hernández Alvarado cree a pie juntillas que si ya se violó la Constitución el pasarse por bajera la ley es lo de menos, por lo que trama ya con sus asesores la forma de saltarse toda tranca jurídica que se le imponga en el camino porque para él, el ser Presidente de la República más que una conquista política es un modus vivendi sin importarle la búsqueda del bien común y el respeto a la voluntad popular que le grita “fuera JOH”.
Como la ley es de aplicación general y se ha permitido que JOH, Presidente de la República viole todo el cuerpo legal incluyendo el principio fundamental de que las Fuerzas Armadas de Honduras de la cual es Comandante en Jefe son apolíticas, obedientes y no deliberantes, por ello, todo soldado o miembro de otros cuerpos uniformados sea cual sea su rango tiene el derecho a aspirar a cargos de elección popular y a ejercer el sufragio como cualquier otro ciudadano hondureño. ¡Estamos!
Licenciado en Periodismo