Al parecer, grabar bromas pesadas que se hacen a gente común y corriente, para después subirlas a Youtube es algo de moda entre los youtubers. Y por alguna extraña razón (¿porque son idiotas?), la práctica de estas acciones de mal gusto consiguen seguidores y fama. Así que alguien tiene que parar a estas personas, que no sólo no son graciosas y nada creativas, son un insulto a la inteligencia y cultura del espectador.
Desde Sam Pepper, conocido por sus bromas de mal gusto, pasando por Reset y su broma de las galletas con pasta de dientes, hasta llegar al ejemplo del día de hoy: Abel García, un youtuber español que tuvo la “original” idea de rociar con spray pimienta a un repartidor de pizza… Vaya, qué divertido (léase con voz sarcástica).
Y ahora, a Abel García parecen gustarle las bromas y los retos. El video que ya ha sido borrado de Youtube (pero aquí lo tenemos), se llamaba ‘Se la lío parda al repartidor de pizza’ (vaya, qué listo).
El video llegó a las casi 40,000 visualizaciones antes de ser retirado, y se ha viralizado a través de otras plataformas sociales como Facebook y Twitter, donde los comentarios se dividen; algunos piensan que este hombre es un genio de la comedia, mientras otros lo critican por sus acciones.
Abel García muestra cómo, supuestamente, echa espray pimienta al rostro de un repartidor de pizza de Dominos Pizza que llevó un pedido a su casa.
Tras tocar la puerta, le entrega el pedido y Abel pide al repartidor que lo espere un poco. Lleva la pizza a la cocina, donde la rocía con gas pimienta para después abrir la caja justo en el rostro del repartidor.
Ambos, García y el repartidor, sienten en seguida el ardor en ojos y cara después de esta fallida (y tonta) broma, que finaliza con García cerrándole la puerta en la cara y diciendo: “No me la traigas más con pepinillos, mira que te lo he dicho”.
En realidad ¿alguno de ustedes encuentra divertida esta broma? Creo que todo este tipo de videos es un insulto al intelecto del espectador. Además de recalcar lo poco gracioso de este video, el chico pudo haber sufrido de daños más fuertes, pues las especificaciones del espray que utilizó dicen que causa “gran irritación en los ojos, gran irritación en la boca, imposibilidad de ver con agilidad, cierre de los ojos de manera involuntaria, dilatación de las pupilas y gran abundancia lagrimal”, entre otras.
El video ha sido muy criticado en las múltiples plataformas sociales, la mayoría de los usuarios opina que a sus acciones no pueden ser llamadas “bromas”.
Sin embargo, el youtuber se defiende de las críticas alegando que le dio “un par de euros” de propina y que debió darle las gracias.
Pero la cadena de pizzas Dominos salió a desmentir el teatrito de Abel, diciendo que todo ha sido un montaje ideado por el joven, algo que veíamos venir.
En su cuenta oficial, la pizzería Dominos avisó que el repartidor del video no cumple con las normas de entrega de un verdadero repartidor, por ejemplo: Dominos no entrega sus pizzas en la caja sola, sino en la caja dentro de una bolsa térmica. También, los repartidores no entregan con casco, sino que deben ponerse una gorra para hacer la entrega.
No obstante, la Policía Nacional investiga el video, según han confirmado a fuentes policiales, para determinar si se trató de una acción real y, de ser así, concretar si al youtuber se le pueden imputar delitos como agresión o contra la dignidad de las personas.
La cadena Dominos no ha presentado ninguna denuncia, y ninguno de sus trabajadores ha declarado ser víctima de ese accidente, lo cual nos hace creer completamente en la falsedad de este video, si en tres días ya le borraron el video de Youtube, y se sabe santo y seña del joven Abel García, ¿cómo es posible que no sepamos nada sobre un pizzero rociado con gas pimienta?
La verdadera pregunta aquí sería: ¿qué límites están dispuestos a rebasar estas personas para ganar fama? Fama traducida en dinero fácil, pero dinero al fin. No necesitan mucho ingenio, sólo una broma que cause morbo en el espectador; no tiene que ser verdadera, no tiene que ser completamente graciosa o bien pensada, es cuestión de prender la cámara, hacer una estupidez y viralizarla.
El problema es que las bromas están llegando al punto de agresiones y delitos, dos cosas que no deberían ser permitidas en nuestra sociedad. Nada importa si son hechas en verdad o son ficticias, eso es suficiente para que mucha gente que lo vea lo crea y quieran repetir estas estupideces.
¿Es Youtube culpable? La realidad es que esta plataforma permite que, hoy en día, cualquiera pueda subir un video lleno de tonterías, el cual será visto por millones de personas. Youtube no es culpable, pero sí un altavoz, la plataforma perfecta para extremistas, acosadores, racistas. Aun así, los tiempos de reacción son rápidos, y videos de gente como esta son eliminados de sus cuentas públicas, esto no basta.
Tal vez sea bueno que, así como son capaces de detectar el contenido con copyright, también podrían ser capaces de analizar el contenido de los videos y detectar términos que sean motivo de censura.
Youtuber ataca con gas pimienta a un repartidor
