Tributo a la diversidad (1/2)

Por: José María Leiva Leiva
Valeria Martínez en la sección Cine 54, del sitio Vida & Estilo, recordaba cómo el 2016 fue un año de mucha crítica para la Academia de Hollywood que al momento de considerar las cintas y protagonistas que fueron nominados al Oscar, ignoraron casi por completo a la comunidad afroamericana de la industria. Un hecho que provocó que varios de sus integrantes, censuran esta falta de diversidad y promovieran un boicot, no asistiendo a la ceremonia de premiación.
En descargo de ello, también se señaló, que no era tanto una situación de discriminación racial, sino sencillamente la falta de buenos guiones competitivos. Sea por una u otra razón, este 2017 la Academia ha incluido en su lista de nominados, a películas; directores y actores de color en todas las categorías interpretativas. Tales son los casos de “Hidden Figures” (Figuras ocultas), que tiene las siguientes 3 nominaciones: Mejor película (dirigida por Theodore Melfi); Mejor actriz secundaria (Octavia Spencer) y Mejor guión adaptado.

“Moonlight”, con 8 nominaciones: Mejor película (dirigida por Barry Jenkins); Mejor director (Barry Jenkins); Mejor actor secundario (Mahershala Ali); Mejor actriz secundaria (Naomie Harris); Mejor guión adaptado; Mejor fotografía; Mejor banda sonora y Mejor montaje. “Fences” tiene 4 nominaciones: Mejor película (dirigida por Denzel Washington); Mejor actor (Denzel Washington); Mejor actriz secundaria (Viola Davis) y Mejor guión adaptado. “Loving”, con una nominación a la Mejor actriz (Ruth Negga). También destaca la nominación por el trabajo fotográfico de Bradford Young, en la película “La llegada”, un filme que no tiene que ver con el tema de afrodescendientes, como los anteriores relacionados.
Así mismo, es digno de destacar otras tres películas que brillan con luz propia, aunque no hayan sido consideradas por la Academia para optar a determinado galardón. Todas encierran temáticas que basadas en hechos reales, marcaron historia, me refiero a “El nacimiento de una nación” (dirigida por Nate Parker); “Reina de Katwe” (dirigida por Mira Nair) y “A United Kingdom” de Amma Asante, contrapartida del filme “Loving”, que narra la historia del Príncipe de Botswana, Seretse Khama (interpretado por David Oyelowo), quien generó un conflicto internacional cuando se casó por amor con una mujer blanca de Londres, Ruth Williams (caracterizada por la preciosa Rosamund Pike), a finales de los años 40.

“Hidden Figures”, ambientada en plena Guerra Fría cuando Estados Unidos competía contra Rusia por llevar al hombre al espacio. La NASA descubrió el talento oculto de un grupo de mujeres matemáticas afroamericanas que fueron los auténticos cerebros tras una de las mayores operaciones americanas de la historia.
“Hidden figures”, (basada en el libro de Margot Lee Shetterly) se convierte así en el relato real de tres de estas intrépidas mujeres, conocidas como “ordenadores vivientes”, la película sigue su ascenso junto a las grandes mentes pensantes de la Agencia Espacial con la tarea de calcular el lanzamiento a la órbita del astronauta John Glenn y garantizar su regreso. Dorothy Vaughn, la ingeniero Mary Jackson y Katherine Johnson (interpretadas notablemente por Octavia Spencer, Janelle Monáe y Taraji P. Henson, respectivamente) superaron cualquier limitación profesional, de raza o de género. A mí gusto y entender, la mejor de todas estas propuestas. Su sólida historia; la reivindicación femenina y de la raza de color; sus regias interpretaciones y los sueños que se alcanzan con tenacidad, en fin, en una palabra: Brillante.

De “Moonlight”, me encantó sobremanera el trabajo de dirección a cargo de Barry Jenkins basado en la obra “In Moonlight Black Boys Look Blue” de Tarell Alvin McCraney, acerca de la compleja vida de un chico afroamericano llamado Chiron, que crece en uno de los barrios más conflictivos y violentos de Miami. En http://www.sensacine.com/ leemos: “Desde su infancia, pasando por la adolescencia, hasta llegar a su etapa adulta, Chiron lucha por encontrar su lugar en el mundo, en un ambiente donde la violencia no da tregua. A medida que pasan los años, el joven vive una constante e intensa lucha interna, para descubrirse a sí mismo. Además de sufrir un constante acoso escolar, el fantasma de la homosexualidad se hace presente en su vida. En este tortuoso andar explorará la masculinidad, la sexualidad y tendrá que hacer frente a los conflictos de su desestructurada familia”.
“Fences”, por su parte está basada en la obra de teatro del mismo nombre, escrita por August Wilson que ya Denzel Washington había interpretado en Broadway. Ambientada en el Pittsburgh de los años 50, cuenta la vida de Troy Maxson (Washington), un ex jugador de béisbol de la liga para negros, que ahora trabaja como recolector de residuos, en constante lucha contra los prejuicios raciales mientras trata de sacar adelante a su familia en una serie de cruciales eventos, que incluyen su infidelidad matrimonial y sus consecuencias. Me encanta The Playlist cuando dice: «No verás un cine rompedor en “Fences”, pero lo que tienes en cambio son dos interpretaciones titánicas (Washington y Viola Davis, como Rose Maxson) y un desaforado drama americano”.