El proceso de depuración de la Policía Nacional ya entró en su etapa final y ahora La Comisión Especial encargada de este proceso se encamina a la recertificación de los altos mandos, para escoger a la nueva cúpula que asumirá el control de la institución.
La Comisión Especial para el Proceso de Depuración y Transformación de la Policía Nacional recomendó el pasado miércoles separar a 815 oficiales, agentes de la escala básica y personal auxiliar, llegando a 3,913 personas separadas de la institución en 11 meses.
El integrante de la Comisión Especial, Omar Rivera destacó ayer que no es simpático recomendar al ministro de Seguridad la cancelación de los policías, pero es un deber ineludible decirle que solamente la integren aquellas personas que gocen de la idoneidad y que estén aptas para incorporarse a la nueva estructura de la Policía Nacional.
Rivera indicó que “el proceso típico de depuración está culminando y ahora nos encaminamos a una nueva etapa en la cual vamos a imponer el proceso radical de reingeniería en los distintos organismos, para que lo que sucedió en el pasado no vuelva a ocurrir en la Policía Nacional”.
Anunció que “nos aprestamos fundamentalmente a recertificar a los altos oficiales para escoger a la nueva cúpula de la Policía Nacional”, de esta forma al dejar la Comisión Especial la responsabilidad, el nuevo director de la Policía, la nueva cúpula y el ministro de Seguridad estarán a cargo de la depuración permanente.
Asimismo se instaurará un proceso radical de reformas a la Academia Nacional de Policía, para que los nuevos oficiales sean formados mediante una mística totalmente diferente, instaurando un sistema disciplinario que sustituya a la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP).
“Vamos a edificar una nueva Policía Nacional, conformada por hombres y mujeres competentes, decentes y valientes; vamos a darle a Honduras, la Policía Nacional que nos merecemos los hondureños”.
