El aeropuerto circular

El tráfico aéreo mundial es cada vez más denso y, a medida que aumenta la cantidad de aviones que despegan y aterrizan cada día, también crece la congestión de las pistas de aterrizaje de los 4.130 aeropuertos que, según la Organización Internacional de Aviación Civil (ICAO, en inglés), operan en el mundo.

Según el informe ‘2016 Air Navigation Report’ de la ICAO (www.icao.int) en 2015 se registraron en el mundo alrededor de 34 millones de salidas de aviones y el número total anual de pasajeros transportados ascendió un 6,4 por ciento en comparación con 2014.

Por su parte, la organización Air Transport Action Group, ATAG (www.atag.org), informa que 1.397 aerolíneas operan una flota de 25.000 aeronaves,  a lo largo de una red de rutas de varios millones de kilómetros alrededor del planeta.

La web Flightradar24 (www.flightradar24.com), un servicio ‘en linea’ de seguimiento de vuelos que le proporciona información en tiempo real sobre miles de aviones en todo el mundo, también permite apreciar la complejidad del tráfico aéreo actual.

Un equipo de investigadores europeos ha diseñado un nuevo concepto basado en una pista circular para solucionar la falta de capacidad de los aeropuertos que, según afirman, es la mayor limitación para el crecimiento del transporte aéreo.

“Se trata del proyecto ‘The Endless Runway’ o TERP, es decir “la pista sin fin”, impulsado por los centros de investigación aeroespacial NLR  (Países Bajos), DLR (Alemania), ONERA (Francia), INTA (España) e  ILOT (Polonia), cuya viabilidad técnica ya ha sido demostrada”, según explica a EFE,  el experto holandés en aviación Henk Hesselink.

Hesselink, coordinador de este proyecto (www.endlessrunway-project.eu) desde el Laboratorio Aerospacial Nacional NLR, en Amsterdam, señala que los proyectos tecnológicos actuales optimizan el uso de la capacidad aeroportuaria disponible pero, a menos que se siga un nuevo enfoque estructural, no permitirán triplicar el tráfico aéreo como está previsto que logren.

Así funcionaría el aeropuerto circular con entrada y salida sobre la pista peraltada. Foto: Endless Runway Project/ National Aerospace Laboratory NLR

MENOR IMPACTO DE VIENTOS Y TURBULENCIAS

“Las limitaciones físicas en las operaciones de la pista, como la separación mínima que debe haber entre los aviones para que los vórtices de estela (turbulencia de aire producidas por los extremos de las alas) de uno no afecten al otro, y los vientos cruzados y de cola, hacen difícil mejorar el rendimiento de las configuraciones convencionales de aeropuertos”, añade.

Según los autores del TERP, la pista circular puede generar un gran avance en la capacidad aeroportuaria, evitando las limitaciones físicas de las pistas convencionales al desplazar los puntos de despegue y de aterrizaje de cada aeronave siendo,  además, sostenible para el medioambiente al reducir el uso del terreno destinados a infraestructuras, la contaminación y el ruido.

La pista circular posibilitará que un avión pueda operar durante los aterrizajes y despegues, independientemente de la fuerza y dirección del viento que sople en la zona, lo cual permitirá a los usuarios del espacio aéreo acortar la trayectoria de sus vuelos y optimizar sus rutas de salida y llegada, según sus proyectistas.

“La dirección de las pistas rectas hace que las maniobras aéreas dependan de la dirección del viento, pero una pista circular permitirá que los aviones despeguen en cualquier dirección y tomen tierra desde cualquier dirección, encontrando siempre en el círculo un punto de aterrizaje o despegue ideal para tener solo el viento en contra y no cruzado”, según Hesselink.

Asimismo, en los aeropuertos convencionales los aviones usan las mismas rutas aéreas de acceso, lo que les obliga a mantener una distancia de separación para evitar las turbulencias de los vórtices de estela, pero la pista circular permitirá reducir la distancia que separa a los aviones que aterrizan y despegan, según el TERP.

“Otra de sus ventajas de esta configuración aeroportuaria es que disminuirá el tiempo que las aeronaves ocupan la pista”, añade Hesselink.

El círculo de la pista, con unos 3 kilómetros de diámetro, será  suficientemente grande como para alojar en su interior la infraestructura aeroportuaria, incluso la de un aeropuerto central, lo cual permitirá que el aeropuerto sea compacto y puedan utilizarlo los aviones de hoy en día, sin necesitar modificaciones estructurales significativas, de acuerdo a lo autores del proyecto.

Una composición con el rostro de Hesselink ante el aeropuerto circular.Foto: Endless Runway Project/ National Aerospace Laboratory NLR

EL AEROPUERTO DENTRO DEL CÍRCULO

‘The Endless Runway’ está configurado básicamente por una pista circular con peralte (mayor elevación de la parte exterior de una curva en relación con la interior) en su cuyo interior discurren una serie de pistas secundarias que conducen a las terminales, hangares y otras infraestructuras aeroportuarias.

Según explica Hesselink a EFE, se han identificado tres condiciones diferentes en las cuales los aviones podrían aterrizar adecuadamente en la pista circular: con viento fuerte, viento suave y vientos cambiantes.

“Hemos investigado este concepto mediante simulaciones efectuadas en ordenador, en las que se estudiaron las aeronaves, el control del tráfico aéreo y el diseño del aeropuerto”, asegura.

“El próximo paso que daremos consiste en los ensayos de vuelo. Los test aéreos en pistas circulares –con drones de alas fijas de hasta 300 kilogramos de peso- servirán para probar el comportamiento de las aeronaves en la pista de aterrizaje circular durante los despegues y aterrizajes, sobre todo bajo diferentes condiciones meteorológicas», según Hesselink.

Añade que el siguiente paso consistirá en efectuar con los drones pruebas de los procedimientos de diversas emergencias aéreas, en entornos controlados y con situaciones programadas, durante las diferentes fases de los vuelos.

Hesselink señala que con los ensayos de aviones no tripulados pretenden que la pista circular se pruebe en la vida real, y destaca: “con esta experiencia, demostraremos que la innovación que proponemos puede ser utilizada realmente y ayudar a la aviación”.

«Tras estos tests, se realizarán vuelos tripulados de prueba, en un proceso enfocado siempre a la seguridad, que llevará varias décadas, hasta el 2050 y más allá, y culminará con pruebas operacionales en los nuevos aeropuertos de este tipo», adelanta a Efe.

El largo de la pista circular es equivalente al de tres pistas rectas, pero los investigadores calculan que puede manejar el tráfico de cuatro pistas normales, según ha informado este experto a la BBC.

Sin embargo, ha admitido a este mismo medio que el gasto de construcción de las pistas circulares es mucho mayor que el de una pista convencional, por la inclinación lateral que requiere y por una mayor anchura de la pista (98 metros en lugar de 60) y largo (10.000 metros frente a un máximo de 4.000).

Por Ricardo Segura.
EFE/REPORTAJES