A lo largo del dçia podemos vivir situaciones que nos estresan y cambian nuestro humor de un momento a otro y cuando menos lo esperamos, la sonrirsa con la que despertamos en la mañana, se convierte en una cara larga o un ceño fruncido al final del día. Está bien, no todo el día tenemos que estar de buen humor, se vale refunfuñar de repente, pero lo que no debemos hacer es ir a la cama con pensamientos negativos.
Y es que según estudios de la Beijing Normal University, irse a dormir enojado tiende a afectar nuestra salud de forma negativa ya que el sueño hará que conservemos las emociones negativas durante más tiempo, además de que al despertar, seguirá la sensación de malestar y en caso de volver a experimentar esa misma situación, te será más estresante enfrentarla.
Para comprobar esto, los investigadores realizaron un experimento basándose en el comportamiento de 73 estudiantes a lo largo de dos días. A cada uno se le pidió asociar ciertas imágenes perturbadoras’ como de personas heridas, niños llorando y cadáveres (sí, cadáveres). Aunque demostraron que la media hora, el 9% los participantes fueron capaces de olvidarlas, a las 24 horas y cerca de la hora de dormir, sólo un 3% de estos pudieron quitarse las imágenes de la cabeza mientras intentaban conciliar el sueño.
Esto es porque mientras dormimos, el cerebro reorganiza el proceso en el que se almacenan las memorias, provocando que las asociaciones sean más difíciles de eliminar en el futuro.
Por otro lado, estudios de la Universidad de Massachsetts sugieren que si has vivido un suceso traumático como una discusión o si viste algo que te perturbó, es mejor que busques algo que te distraiga antes de poner la cabeza en la almohada de modo que cuando duermas, tu cerebro no guarde esas emociones y pensamientos negativos. Hacer ejercicio o ver una película divertida, producirá oxitocina y dopamina, hormonas de la felicidad. Lo mismo ocurre cuando tienes una discusión con tu pareja, hay que hacer algo que distraiga antes de cargarte de emociones negativas contra ésta.
Los estudios afirman que es frecuente que no poder dormir después de un suceso tan intenso ya que por instinto, el cerebro buscara evitar que el sueño almacene esas memorias. Así que dormir con la cabeza clara, te ayudará a tomar mejores decisiones, pues tul cerebro será capaz de elaborar soluciones durante el sueño.