Desmayos y caras desencajadas por masivo traslado de reos

Desmayos, caras desencajadas y lloretas se registraron alrededor del centro penal sampedrano, mientras 538 reclusos eran trasladados a otras cárceles, lejos de esta ciudad, que el próximo 14 cerrará una de las cárceles más pobladas y peligrosas del país, gobernada por los reos.

Al darse cuenta de los traslados de reos del penal sampedrano, los familiares de estos inmediatamente se hicieron presentes para exigir que no se los llevaran, ya que les será más difícil ir a verlos a otros sitios, pues no cuentan con los recursos económicos suficientes.

Tal es el caso de Josefina Ferrera, quien se trasladaba, desde Villanueva a San Pedro Sula, para visitar a uno de sus hijos y un hermano que hasta ayer lunes guardaban prisión en el presidio de esa ciudad.

Doña Josefina, entre sollozos, manifestó que con mucho esfuerzo lograba conseguir unos centavos para movilizarse a ese recinto para conversar un momento con sus parientes recluidos. Se dedica a lavar ropa ajena y así se mantiene ella y también le ayuda a su hijo y hermano encarcelados.

“Le pido al Presidente que por favor recapacite y pare los traslados porque nosotros somos gente muy pobre y no tenemos recursos para ir a esos lugares tan largos a visitar a nuestros familiares” expresó con lágrimas en sus ojos.

Aquí recordaban a los “caídos”, algunos de los reos de la pandilla 18.

Por otro lado, otra fémina, quien prefirió no identificarse, manifestó su preocupación debido a que su esposo, privado de libertad era quien la sustentaba, tanto a ella, como a sus dos hijos.

Refirió que su compañero de hogar, quien lleva más de un año preso, señalado por el delito de adquisición de vehículo robado, condenado a 9 años por haber comprado una motocicleta con reporte de robo, tenía un trabajo en el centro penal y que el dinero que conseguía se lo daba para la alimentación de sus vástagos.

“No se cómo voy hacer, no tengo un empleo, mi marido es quien nos mantenía con su trabajo en el penal. Me siento preocupada, he andado buscando trabajo y no he podido encontrar una oportunidad” comentó la mujer.

Añadió “pido al Presidente que genere más fuentes de empleo, pues ese es uno de los motivos por los que hay tanta delincuencia”.

La desesperación se apoderó de las personas especialmente de las mujeres, pues algunas se desmayaron y fueron auxiliadas por otras.

Al igual que estas dos mujeres, otras parientes de reos manifestaron su inconformidad con el traslado, arguyendo que no tienen recursos para trasladarse a otras ciudades para visitar a sus seres queridos.

En ese sentido pedían a las autoridades penitenciarias que los enviaran a la granja penal ubicada en La Acequia, Quimistán, Santa Bárbara, cuya construcción se encuentra enfrascada.

Ante las protestas de familiares, los primeros convoyes comenzaron a salir rumbo a otras ciudades transportando a los privados de libertad, lo que provocó que muchos de ellos especialmente mujeres rompieran en llanto y llegaran al grado de desmayarse, siendo auxiliadas por otras personas.

PRESIDENTE HERNÁNDEZ:
Centro penal sampedrano será cerrado el 15 de octubre

Familiares se apostaron a las orillas de la calle para decir adiós a sus seres queridos quienes iban rumbo a otras cárceles.

Para el 15 de octubre se espera que el Centro Penal de San Pedro Sula no tenga ningún privado de libertad para que posteriormente se construya en ese lugar una nueva obra de beneficio social, aseguró ayer el Presidente Juan Orlando Hernández.

El Centro Penal sampedrano cumple sus últimos días y en menos de un mes será demolido, mientras que a las 4:30 de la madrugada de ayer se inició el traslado de 538 reos del Centro Penal de San Pedro Sula a diferentes cárceles del país.

«Estos reclusos son de baja o mínima peligrosidad e incluso muchos de ellos con problemas de salud”, dijo Hernández.

El Presidente Hernández notificó que la gran mayoría de los reclusos que estaban en San Pedro Sula han sido trasladados a La Tolva (El Paraíso) e Ilama (Santa Bárbara) y las del sexo femenino estarán en el Centro Femenino de Adaptación Social (Cefas).

La angustia y desesperación “reinó” en las afueras del penal, mientas los reos eran trasladados de cárcel.

En cárceles como la de El Porvenir habrá módulos especiales para que los reos hagan trabajos ocupacionales en materia técnica y agrícola.

El gobernante hondureño reafirmó que se hará un proceso de consulta con la ciudadanía sampedrana para ver qué se construye en el sitio donde está el Centro Penal, ya sea un megaparque u otra obra.

“Creo que es una bonita oportunidad para que los sampedranos miren ese lugar como un símbolo que nos recuerde para no volver a pasar por esa tragedia” de sufrir altos índices de violencia, dijo Hernández.

El jefe de Estado detalló que las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario manifestaron que se han clausurado mesas de billar y pulperías que estaban en el interior de los recintos penales, lo que ha causado molestia a los privados de libertad.