Jugadores de fútbol americano le declaran la “guerra” a Trump

Luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instara a los aficionados a boicotear los partidos de la Liga Nacional de Football Americano, en rechazo a los jugadores que se arrodillan durante el himno nacional, una docena de atletas repitieron el gesto en los partidos de este domingo.

En el primer partido de la NFL desde que Trump tocó el tema el viernes en un discurso en Alabama, por lo menos una docena de jugadores de los Baltimore Ravens y Jacksonsville Jaguars pusieron una rodilla en tierra durante la interpretación del himno estadounidense en un partido jugado este domingo en Londres, Inglaterra.

Otros elevaron sus puños cerrados en una muestra de solidaridad y repudio a la violencia policial contra los negros en Estados Unidos.

Más protestas se esperan en los otros encuentros de este domingo, cuando se complete la tercera semana de la temporada de la NFL.

Protestas

La de Londres fue una de las mayores protestas desde que el ex mariscal de campo de los 49ers de San Francisco Colin Kaepernick, que es afroamericano, comenzó a negarse a saludar al himno en 2016.

La protesta se extendió también el sábado a las Grandes Ligas de béisbol por primera vez, cuando el receptor negro de los Atléticos de Oakland, Bruce Maxwell, se arrodilló durante el himno antes de un partido en California.

La respuesta de Trump llegó en un tweet temprano en la mañana dominical en el que dijo: “Si los aficionados de la NFL se niegan a ir a los juegos hasta que los jugadores dejen de faltar al respeto a nuestra Bandera y País, verán que el cambio tiene lugar rápido”.

Según el diario New York Times, la realidad es que los ratings televisivos de la NFL estaban bajando ya antes de la protesta de Colin Kaepernick arrodillándose.

Puntos de vista

Los defensores de la protesta dicen que los jugadores tienen todo el derecho de expresar sus puntos de vista social en el momento del juego.

Empero, los críticos indican que los fanáticos, que pagan mucho dinero para asistir a los juegos de la NFL o verlos en televisión, no deberían tener que aguantar las declaraciones políticas de los jugadores, y que las protestas son irrespetuosas al país y a sus militares.

El secretario del Tesoro de Trump, Stephen Mnuchin, se metió en la batalla el domingo, defendiendo a Trump y diciendo que la NFL debería tener una regla que obligue a los jugadores a mostrar respeto por el himno nacional, permaneciendo de pie mientras se interpreta.

“No se trata de los demócratas, no se trata de los republicanos, no se trata de la raza, no se trata de la libertad de expresión. Pueden hacer uso de su libertad de expresión en su vida privada”, dijo Mnuchin a la cadena ABC.

Todo comenzó el viernes en un mitin republicano en Alabama, donde Trump atacó a los jugadores activistas de la NFL -en su mayoría afroamericanos- y los calificó de “hijos de puta” por arrodillarse o sentarse durante las interpretaciones del himno en señal de protesta.

El mismo día, la estrella de básquetbol Stephen Curry, el mejor jugador de Golden State Warriors, dijo que no asistiría a una tradicional recepción en la Casa Blanca en honor a los campeones de la NBA.

En otra salva de tweets en la madrugada Trump le respondió: “Ir a la Casa Blanca es considerado un gran honor para un equipo de campeonato. Stephen Curry está dudando, por lo tanto la invitación se retira!”.

El domingo, Robert Kraft, amigo cercano de Trump y propietario de los New England Patriots, campeones del pasado Superbowl, emitió una declaración diciendo estar “profundamente decepcionado por el tono” de los comentarios del presidente el viernes en Alabama.