¿Sabes qué son los sistemas de protección sísmica?

Existen varias causas por las cuales las construcciones sufren mayores o menores daños por los terremotos, entre ellos está la elección de materiales, los errores de construcción o diseño y la cimentación no adecuada para el terreno elegido.

A través de sistemas de protección se pueden reducir los daños a elementos estructurales y no estructurales de los edificios y disminuir el riesgo de accidentes de sus habitantes.

¿Cuáles son los sistemas de protección sísmica?

Los aisladores sísmicos

Estos dispositivos generan una interfaz flexible entre el suelo y la superestructura, así los movimientos generados por un sismo no se transfieren a la estructura.

Los disipadores de energía

Estos dispositivos absorben y desvanecen la energía por lo que se ubican en puntos estratégicos de las estructuras.

Los aisladores sísmicos reducen la energía del sismo que ingresa a la estructura, mientras que los disipadores de energía permiten desvanecer parte de la energía que ingresa a la estructura por medio de dispositivos especialmente diseñados.


¿Qué tipo de estructuras son adecuadas para la aislación sísmica y la disipación de energía?

En general, el uso de aisladores sísmicos ha demostrado ser eficiente en estructuras no demasiado altas, mientras los disipadores de energía, resultan más eficientes cuando se utilizan en estructuras esbeltas o flexibles.

¿Pueden colocarse aisladores a una estructura existente?

Sí, es posible utilizar aisladores para el refuerzo de estructuras. Se ha realizado en estructuras como el City Hall y el Puente Golden Gate en San Francisco y el LAX Theme Building en Los Angeles.

¿Puede incorporarse disipadores de energía en una estructura existente?

Sí, los disipadores de energía pueden ser utilizados tanto en el diseño de estructuras nuevas como en el refuerzo de estructuras terminadas.

¿Cómo puedo saber si mi edificio es seguro en caso de sismo?

Según el Centro Nacional de Prevención de Desastres, toda edificación debe ser diseñada y construida por un profecionista (ingeniero, arquitecto), con previa licencia de construcción. Mismo que se hará responsable de los daños que sufra la construcción siempre y cuando sean derivados de una mala edificación. Es importante asegurarnos de que nuestra vivienda y lugar de trabajo cumpla con las normativas correspondientes. Y que tenga un sistema de protección sísmica o una estructura diseñada especialmente para soportar este tipo de desastre.