EEUU aplicará sanciones contra la Guardia Revolucionaria de Irán

El presidente Donald Trump anunciará sanciones adicionales contra los Guardianes de la Revolución, el ejército de élite iraní, aunque sin declararlos una organización terrorista, dijo este viernes el secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson.

«Hemos considerado que hay riesgos particulares y complejidades en designar a todo un ejército, por así decirlo, de un país», dijo Tillerson, quien detalló que en cambio habrá sanciones para afectar «las estructuras financieras y a ciertos individuos» en Irán.

Días atrás, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria iraní advirtió a Estados Unidos de que sus bases y tropas desplegadas en Oriente Medio estarán en peligro en caso de imponer nuevas sanciones contra Irán.

Bahram Qasemi, portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, advirtió el domingo pasado que si Washington planea incluir al cuerpo de seguridad en su paquete de sanciones contra la República Islámico «sería un grave error estratégico». «Si lo hacen, nuestra respuesta será firme, decisiva y aplastante. Estados Unidos deberá aceptar las consecuencias», apuntó el vocero en una conferencia de prensa.

Sobre el Acuerdo Nuclear
El secretario de Estado también adelantó que Trump va a anunciar que retira el apoyo presidencial al acuerdo nuclear alcanzado en 2015 con Irán sobre su programa nuclear, pero sin abandonar el pacto, según . «Nuestra intención es quedarnos en el JCPOA (siglas del acuerdo), pero el presidente lo descertificará», dijo Tillerson, al señalar que el futuro del pacto quedará ahora en manos del Congreso.

El acuerdo sobre el programa nuclear iraní, suscrito el 14 de julio de 2015, permitió que se levantara una parte de las sanciones internacionales impuestas a Teherán.

Firmado en Viena entre Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, China, Rusia, Francia y Reino Unido) más Alemania, el Plan Global de Acción Común (PGAC) preveía un levantamiento progresivo de las sanciones a cambio de la garantía de que Teherán no se iba a dotar del arma atómica.

Teherán se comprometió a reducir sus capacidades nucleares (centrifugadoras, reservas de uranio enriquecido…) durante varios años.

La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) está encargada de controlar regularmente todas las instalaciones nucleares iraníes, con prerrogativas considerablemente más importantes. Irán aceptó un «acceso limitado» de la AIEA a instalaciones no nucleares, en particular militares.