Huelga impidió que cientos de usuarios de transporte público llegaran a su destino

Por segunda vez consecutiva, el transporte en San Pedro Sula, La Planeta y otros sectores se vio paralizado porque los motoristas y conductores aseguran estar cansados de que los policías de Tránsito les decomisen las licencias de conducir.

El paro inició a partir de las cinco de la mañana de este viernes y poco a poco se fueron sumando otras unidades, quienes realizaron protestas en sus puntos de buses y en el bulevar del Sur y del Norte.

Harold Mena, motorista de rapidito de la empresa Aguilera, dijo que “está bien que a uno le quiten la licencia si uno comete alguna infracción, pero el detalle es que por dos faltas que uno haga nos la cancelan por seis meses”.

Para ellos el que los dejen sin licencia es perjudicial porque comentaron que no tendrán dinero para llevar alimentos a sus familias.

Mena detalló que las esquelas se las aplican cuando van conduciendo y hablando por celular, cuando se pasan el semáforo en rojo, hacen paradas en lugares no permitidos, ir peleando ruta, llevar la puerta abierta, entre otras.

Los carros de paila se benefician cuando los transportistas hacen paro de labores, a cada pasajero le cobran 20 lempiras.

“En este año me han quitado la licencia una vez y cuando la vamos a reclamar tenemos que pagar una multa de 600 lempiras”, expresó el joven, quien transporta pasajeros desde la colonia Felipe Zelaya hasta el centro sampedrano.

Por su parte, Carlos Pereira manifestó que labora como chofer de rapidito y declaró que Tránsito no los deja trabajar y todo eso les afecta. “Si andamos la puerta abierta o nos pasamos el semáforo en rojo ya nos detienen para multarnos. Ellos solo piensan en sus beneficios y en los pobres no”. El conductor Denis García dijo que “esto es debido a las altas multas que nos están aplicando los de Tránsito, pero lo que ellos no saben es que nosotros tenemos que pagar altas tarifas”.

Refirió que pagan más de mil lempiras de tarifa a diario y en cada rapidito solo caben 20 personas. “Les cobramos ocho lempiras, por eso tratamos de hacer la tarifa lo más rápido porque no tenemos un sueldo fijo”.

Los pasajeros mientras esperaban los buses.

AFECTADOS

Los usuarios esperaron por varias horas para que reanudaran el servicio de transporte, para el caso doña Alba Lara dijo que “ya ratos salí de mi casa para ir a mi trabajo, pero me encuentro con la sorpresa de que no hay buses trabajando. No me voy en taxi porque no tengo mucho dinero”. Así como esta señora de 53 años, cientos de pasajeros estuvieron por largas horas en las paradas de buses. “Estos paros sería bueno que lo hagan, pero que no detengan todas las unidades para llegar a nuestros empleos”, indicó Javier Molina.