Netflix venció a Disney…

“Glee“, “American Horror Story”, “American Crime Story”, “Feud”, “9-1-1″… Ryan Murphy se ha posicionado en una de las mentes más creativas de la televisión estadounidense y eso, claro, lo convirtió en un verdadero botín en los tiempos que corren. Por eso, Netflix desplegó todas sus armas de seducción para sellar un acuerdo con el escritor y productor y, finalmente, lo consiguió.
La industria del entretenimiento en el país del norte sufre una fuerte sacudida estas horas, luego de que se hiciera público que Murphy abandonará 20th Century Fox TV para aterrizar, a partir de julio, en la compañía de streaming. Y no lo hizo por nada: según trascendió, el contrato es por cinco años y los honorarios que percibirá el realizador rondarán entre los $250 y los $300 millones de dólares sobre el final del acuerdo. La cifra no sólo representa un récord histórico, sino que marca un precedente que preocupa a las tradicionales cadenas de televisión.
Según publica Variety.com, Netflix también le garantizó a Murphy el financiamiento de los costos generales para su productora y la posibilidad de seguir percibiendo dinero por los programas que tiene al aire en FOX o FX, señales en las que desarrolló su carrera desde 2003. Pero la compañía también impuso sus condiciones: la suma final que el creador de “Glee” percibirá dependerá de que sus programas rindan y alcancen ciertos objetivos de audiencia.
El coqueteo de Murphy y Netflix no es nuevo. Meses atrás, en coproducción con 20th Century Fox TV, el realizador había acordado trabajar en Ratched, una serie que buceará en los orígenes de la enfermera de la película Atrapado sin salida. También en los próximos meses estará disponible The Politician, una sátira política protagonizada por Ben Platt que está basada en una idea de Murphy.
Aún cuando el acuerdo entre vigencia, en julio de este año, el productor continuará trabajando en los shows y proyectos que siguen activos en FOX y FX, incluyendo las franquicias “American Horror Story”, “American Crime Story” y “Pose”, un drama aún sin estrenar que está ambientado en la década de 1980 y que gira en torno a la comunidad transgénero de la ciudad de Nueva York.
El pase de Murphy a Netflix se produce en un momento de transición de la 21st Century Fox, compañía que en diciembre le vendió a Disney sus principales activos en materia de entretenimiento. Disney, de hecho, esperaba retener al prolífico creador entre sus filas, aunque no consiguió hacerle sombra a la oferta realizada por la compañía de contenidos vía streaming.
Este millonario acuerdo fue comparado inmediatamente con el que, en agosto pasado, Netflix selló con Shonda Rhimes, otra productora y realizadora exitosa en materia de espectáculos televisivos. Ese pacto se firmó por unos $100 millones de dólares distribuidos a lo largo de cinco años, aunque ese número podría crecer en caso de que las ficciones producidas por Rhimes presenten buenos rendimientos en pantalla.