Jóvenes venden chocolates para pagar sus estudios universitarios

Hacer a un lado la pena, usar la creatividad y levantar la mirada hacia el futuro, es la iniciativa que ha tomado un grupo de jóvenes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) que vende chocolates en el campus universitario para financiarse sus estudios.
Dice un dicho que, “cuando el ser humano enfrenta necesidades, es cuando saca la creatividad”, para superar cualquier carencia. Pues eso es lo que hacen José David García, de la carrera de Ingeniería Civil; y Cristian Membreño, de la carrera de Ingeniería Eléctrica de la UNAH.
Ellos se han vuelto populares en los pasillos de las diferentes facultades, pues caminan con los paquetes de chocolates en las manos, ofreciéndoselos a los demás compañeros. Con mucha cortesía y educación, dicen: “cómprenos chocolates, que con esto pagamos nuestros estudios”. De esa manera, los clientes les compran una o dos barritas a 10 lempiras y lo hacen con mucho gusto.
Membreño contó que estudia a tiempo completo y durante el día, cuando tiene una hora libre, sale a emprender su venta en cada uno de los edificios. Luego regresa a su facultad a recibir clases.
“La iniciativa surgió desde hace dos años que estoy estudiando y al ver que a la hora del almuerzo no andábamos dinero para comprar comida, pensamos que vendiendo chocolates podíamos agenciarnos de algunos lempiras para comprar”, relató Membreño, quien dijo que vive en una colonia al sur de Comayagüela.
Agregó que de esa manera han salido de apuros para comprar libros, pagar el transporte y otros gastos que se hacen para seguir avanzando en la carrera.
Al consultarle si tiene el apoyo de sus padres, respondió que “mis padres son personas de escasos recursos económicos y al inicio me daban dinero, pero llegó el momento que me dijeron hasta aquí podemos ayudarte y es por eso que vendemos chocolates para costearnos la universidad solos”.

Los estudiantes son populares y hasta el vicerrector Áyax Irías les compra su producto.

Por su lado, García contó que la carrera de Ingeniería Civil que está cursando es una de las más caras y su condición económica no le ajustaba para seguir estudiando y por eso se sumó a la actividad de vender chocolates.
“Esto ha surgido porque en este país casi no hay trabajo y nuestros padres son de escasos de recursos económicos, y para tener ingresos tenemos que hacer algo y con un grupo de ocho amigos decidimos vender chocolates para costearnos los estudios”, indicó el joven.
Añadió que sus demás compañeros que se dedican a esa venta también tienen los mismos problemas económicos “y nos hemos organizado, con directiva, donde hay un administrador para hacer fondos”.
Aseguró que al día obtiene una ganancia promedio de 200 lempiras, y ahorran para que cuando haya alguna necesidad, tener de dónde sacar dinero y de esa manera se han costeado sus estudios en los últimos tres años.
Para finalizar dijo que mientras siga estudiando, se dedicará a ese negocio, hasta salir con el título de Ingeniería Civil. Este tipo de iniciativas ocurre también en las mejores universidades del mundo, donde muchos estudiantes se autofinancian sus estudios.