El escritor hondureño Mario Ardón está presentando en estos días en su país su más reciente obra, «La Sigualepa. Estudios sobre cultura popular tradicional aplicada» en Honduras, en una edición especial de la Fundación Argos (Colombia).
Ardón recordó que su primer contacto con «la sigualepa», un ave mesoamericana que en el norte del continente se le conoce como el «correcaminos» y se le atribuye mucha inteligencia y vivacidad, lo tuvo cuando era un niño de tres años en un sembrado de fríjoles al que había sido llevado en brazos por su padre.
Aquel niño se pudo quedar con el correcaminos en sus manos luego de que su padre lo rescató entre las guías del frijolar que comenzaba a florecer y en las que quedó enredado, pero su respuesta cuando se lo entregaron fue no, «porque lo quiero libre».
El autor considera que el correcaminos o sigualepa es como un símbolo de identidad para Honduras y la región mesoamericana, que se extiende de México a Colombia.
La nueva obra de Ardón se imprimió en edición especial en Colombia, luego de que representantes de la Fundación Argos vieron la versión sencilla que el investigador había llevado a una Asamblea Global de Democratización del Conocimiento, en Cartagena, en 2017.
«Pongo el libro en una mesa de exhibición de obras y llegaron los de Fundación Argos y dijeron nosotros publicamos una versión de lujo de este libro», relató Ardón, quien nació en 1956 en la comunidad de Quebraditas, departamento de Copán, en el occidente de Honduras.
En cinco días, Ardón, con estudios de Antropología y Agroecología en Costa Rica, España, Guatemala y Panamá, tenía listos todos los contenidos, incluidas múltiples fotos hermosas para la nueva versión de su libro, al que le puso «La Sigualepa» porque «trasciende Honduras», país que históricamente ha sido Mesoamérica.
Ardón indicó que los estudios que ha hecho durante 30 años sobre la cultura popular hondureña le han dado «una aproximación a la cultura desde sus diferentes planos» y «eso es lo que más» puede «celebrar en la vida como investigador».
En el libro Ardón relata «detalles de la esencia de la cultura hondureña y mesoamericana que están ahí», de los que hay uno que le encanta mucho porque trata sobre los indígenas lencas más tradicionales que viven en el occidente del país, quienes siembran «maíces rojos entre la milpa».
La razón para eso, explica el escritor, es que los granos rojos «tienen unas cualidades de finura y de consistencia que evita las plagas y las enfermedades».
«Sembrar maíces rojos dentro de la milpa significa estar reconstruyendo en cada cosecha el maíz. Entonces es como la esencia, yo digo que el maíz es alimento, pariente y dios», añadió.
El libro de Ardón se compone de seis capítulos que tratan sobre cultura popular tradicional hondureña, manifestaciones de la cultura material, social, espiritual-mental, popular tradicional aplicada y métodos participativos aplicados a experiencias de investigación y desarrollo.
En su obra el investigador lleva al lector a múltiples manifestaciones populares tradicionales en Honduras como la gastronomía, la alfarería lenca en la comunidad de La Campa, la vivienda rural, tecnologías tradicionales de cultivo, cultura y alimentación, y la pintura popular hondureña.
También recrea los orígenes de las actividades lúdicas infantiles en Honduras, el baile de «Moros y cristianos», pastorelas, el folclore literario hondureño, del hecho real al cuento maravilloso y la religiosidad popular tradicional.
Se suman el conocimiento endógeno en tiempos de crisis, la agroecología, la cultura popular tradicional aplicada a la educación y momentos educativos en manejo natural de plagas, entre otros temas escritos de manera sencilla y de fácil y agradable lectura.
Ardón también ha hecho investigaciones aplicadas sobre cultura, medioambiente y desarrollo entre campesinos, indígenas y afroamericanos de Centroamérica, México, El Salvador, Suramérica, España y Portugal.
Sobre las investigaciones de Mario Ardón, la escritora hondureña Helen Umaña considera que «ha realizado una labor ejemplar» en la cultura popular con una «adecuada sistematización e inteligente interpretación».
«La Sigualepa. Estudios sobre cultura popular tradicional aplicada», es una obra que «viene a recordarnos que, en Honduras, hay hombres y mujeres que siguen apostando por la pervivencia de la palabra que, para la mayoría, ha caído en desuso», como «amor a la patria, honradez, dignidad, justicia y belleza», subraya Umaña. (EFE)