Universitarias exigen redoblen seguridad en UNAH-VS

La organización feminista universitaria Atziry, en conjunto con el Colectivo Libertario y miembros de distintas asociaciones estudiantiles realizaron ayer un plantón en la Plaza Floylán Turcios, de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, en el Valle de Sula (UNAH-VS), con el fin de alzar la voz ante los últimos hechos de violencia y agresión sexual ocurridos a su interior.

Hace dos días trascendió la violación de una joven de primer ingreso en los baños del segundo piso del edificio 2 del campus universitario, así como las agresiones físicas con arma blanca hacia otra estudiante.

Para los dirigentes estudiantiles, este fue el detonante para empezar a presionar a las autoridades para que dupliquen y mejoren la seguridad del centro universitario.

Melisa Ruiz, integrante de Atziry, manifestó que el propósito del plantón era hacer un eco de lo que está sucediendo en la universidad, donde “están ocurriendo agresiones sexuales y están violentando nuestros derechos. Esta ola delincuencial ha penetrado nuestras paredes. Esta es una alerta feminista que se ha emitido”.

Recalcó que actos como estos han pasado en varias ocasiones, pero que solamente han quedado en una mera denuncia o especulación.

Asimismo, hizo un llamado a las autoridades universitarias para que tomen una postura clara acerca de lo acontecido y que unan sus voces para que juntos puedan clamar por más seguridad para este recinto.

Karen Santos, feminista universitaria, dijo que exigen una correcta investigación de los actos delincuenciales que se están presentando en la universidad, ya que se han quedado varias denuncias sin resolver.

Las jovencitas pegaron afiches en la UNAH, en protesta por los abusos.

PROBLEMA DE AÑOS

En los últimos meses se han acrecentado los asaltos en los edificios y parqueos del recinto universitario. Los estudiantes manifestaron que esto se debe a las debilidades que ha mostrado el Alma Máter para brindarles seguridad.

Actualmente, la UNAH-VS cuenta con 38 guardias de seguridad que realizan dos turnos. Es decir, 19 custodian desde 6:00 de la mañana hasta 6:00 de la tarde y el resto durante la noche hasta el amanecer. Muchos estudiantes consideran que esta cantidad es insuficiente para proteger a más de 20 mil personas que asisten a diario al campus.

Entre las zonas de mayor atraco están el estacionamiento del recinto y el edificio cinco. “Una amiga mía fue seguida por unos hombres que se conducían en un carro en el parqueo y querían que se subiera a la fuerza. Ella tuvo que correr hasta el edificio cuatro para no ser alcanzada”, relató la estudiante Jennifer Contreras.

Otros alumnos indicaron que el edificio 5 es un sitio alejado y en muchos pasillos que conducen hacia allí hay mala iluminación, lo que favorece a los delincuentes que se infiltran en el recinto universitario.

Ya la población quiere que se redoble la seguridad.