Facebook registra desde tus ventanas en segundo plano hasta qué movimientos de ratón haces

Mark Zuckerberg se sometió hace unas semanas una sesión de control por parte del Senado de los Estados Unidos hace algunas semanas, un día antes de comparecer ante el Congreso y ante también de hacer lo propio ante la Comisión Europea. El fundador de Facebook contestó mucho –aunque buena parte fuera poco relevante tanto por sus intenciones de limitar las respuestas como por la ineptitud de algunos de los senadores– acerca de la propia compañía y Cambridge Analytica, pero otras muchas preguntas quedaron sin atender.

Zuckerberg prometió entonces que su equipo contestaría a todas las preguntas formuladas y las remitiría al Senado en un breve espacio de tiempo, algo que también ha tenido que hacer tras su visita a Europa debido a la brevedad de la intervención y a un formato poco adecuado para permitir exprimir al máximo el tiempo disponible. La red social remite ahora dos documentos con preguntas y respuestas con una extensión conjunta de casi 500 páginas con las que desde Facebook quieren poner punto y final a esta etapa.

A pesar de todo, y como uno podría suponer, la compañía tampoco se prodiga en respuestas demasiado explícitas en esta ocasión. La sucesión de preguntas es atajada en numerosas de las contestaciones con referencias a las políticas de uso de Facebook y a datos muy generales o poco explícitos. No obstante, la extensión sí permite desgranar algunas respuestas interesantes que ofrecen más información acerca de la información recopilada por la plataforma y el uso de esta por su parte.

Si la información es poder, Zuckerberg es el rey

Una de las cuestiones candentes a las que se tuvo que enfrentar Zuckerberg era si Facebook recopilaba cierta información de personas que no eran usuarios registrados de la red social. Más tarde reconoció que así era, aunque todo ello con la mejor de las intenciones para evitar abusos y mejorar la calidad de la plataforma, claro. Cuánto hay de verdad en todo ello es algo que quizá ni el propio CEO podría dilucidar llegado este punto.

En estos nuevos informes, la masiva plataforma ofrece información, punto por punto, de qué información obtienen de los usuarios. Según se puede leer, Facebook cuenta no solo con los datos que los usuarios proporcionan (comentarios, ubicaciones, páginas o grupos, por ejemplo) sino también con otros de los que quizá la persona no tenga consciencia de estar ofreciendo. Tales son el acceso a lo que se ve a través de la propia cámara del terminal, el sistema operativo, qué ventanas se encuentran en segundo plano o los movimientos que se realizan con el ratón en la pantalla.

Una enorme cantidad de información que Facebook recopila de sus más de 2.000 millones de usuarios activos mensuales que hacen patente la posición única de la red social y que, si se suma a la propiedad de Instagram y WhatsApp, queda claro que no hay rival que pueda tener tanto acceso a datos de usuarios en el entorno social como el imperio de Zuckerberg. A este respecto, entre las respuestas aseguran también que están redoblando sus esfuerzos para impedir que terceros puedan obtener en algún momento información privada de los usuarios.

Estamos duplicando la cantidad de personas que trabajan en seguridad de 10.000 el año pasado a más de 20.000 este año. Esperamos que estas inversiones tengan un impacto en nuestra rentabilidad. Pero la seguridad de las personas que usan Facebook debe ir antes que las ganancias.

Los usuarios, mejor si están informados

Facebook quiere también que los usuarios conozcan mejor el tratamiento que se les da a sus datos, para lo cual ha creado un laboratorio de diseño e innovación que «busca mejorar las experiencias de los usuarios en torno a los datos personales». Bautizado como TTC Labs y localizado en Dublín, Irlanda, «TTC Labs es una plataforma abierta para compartir e innovar y cuenta con ideas de destacados académicos, expertos en diseño y derecho» enfocado a la mejora de la transparencia, la confianza y el control de información personal.

Trabajando de forma colaborativa y basándose en enfoques de código abierto, TTC Labs busca promover prácticas nuevas y más centradas en las personas para que entiendan cómo son utilizados sus datos por los servicios digitales, de manera que les resulte fácil de entender y controlar.