La actividad económica conformada por agricultura, ganadería, silvicultura y pesca cayó 2.2 por ciento, durante el primer trimestre del año, según el Banco Central de Honduras (BCH), comportamiento influenciado por la menor producción de café, palma africana y banano. No obstante, la actividad de pesca mostró crecimiento.
Estos sectores registraron una contribución negativa de 0.3 puntos porcentuales al Producto Interno Bruto Trimestral (PBIT) recientemente emitido por el BCH. Al cierre del primer trimestre de 2018, el PIBT, serie desestacionalizada, reportó un crecimiento de 0.9 por ciento con respecto al cuarto trimestre de 2017. Mientras tanto, de forma interanual este registró una tasa de variación de 3.1 por ciento. El comportamiento negativo de los cultivos agrícolas se explicó por el descenso en el cultivo de café, ante la normalización en los volúmenes cosechados, luego de los altos niveles alcanzados en 2017.
Mientras, la caída en el cultivo de palma africana fue resultado de condiciones climáticas desfavorables, las que incidieron en el desarrollo de la fruta, así como de las inundaciones experimentadas a finales de 2017, que afectaron las plantaciones que entraron al proceso productivo en el presente año; y en menor medida por la menor producción de frutas, especialmente melón y sandía, por la baja en los rendimientos obtenidos por efecto climático.
No obstante, la trayectoria positiva en el cultivo de tubérculos y hortalizas, favoreció en parte el resultado total de esta actividad.
La reducción en la producción de banano fue consecuencia de pérdidas en la cosecha de algunas plantaciones, por problemas laborales (huelga) en una de las empresas productoras.
Por su parte, el incremento en el Valor Agregado Bruto (VAB) de la actividad de pesca, se explica por el desempeño del cultivo de camarones; cría de peces, por alza en la demanda de tilapia en la industria manufacturera y en la captura de langostas y camarón de alta mar, por una mayor disponibilidad de estos en los bancos de extracción.